enero 03, 2014

La literatura beniana y el Amazonas / Homero Carvalho Oliva

La literatura beniana y el Amazonas

En la Amazonía hay un carácter distinto de mirar, de sentir, de nominar, de soñar y de poetizar el mundo. 00:00 / 02 de enero de 2014

La Razón (Edición Impresa) / Homero Carvalho Oliva


Siempre es agradable saber que se ocupan de nuestra literatura en el extranjero. El poeta y profesor universitario Saulo Gomes de Sousa me hizo llegar la conferencia que dictó en el seminario “Historicidades Integradas y Culturalidades Amazónicas”,  que se realizó en el Centro de Humanidades de la Universidad Federal de Rondônia, Brasil, titulada Una muestra de la literatura beniana en su entorno vital.

Saulo es magíster en Historia y Estudios Culturales, y hace algunos años finalizó su licenciatura justamente con una tesis sobre la literatura beniana en el contexto amazónico. Durante su investigación se contactó conmigo y con otros escritores para documentarse; incluso viajó al Beni para proveerse de libros y conocer a algunos autores. En abril de 2012 nos conocimos personalmente en el Segundo Encuentro de Literaturas Amazónicas, que se realizó en la ciudad de Pucallpa, Perú.

El objetivo general de su conferencia es el de “investigar la relación entre la gente, el paisaje y el mito beniano en el contexto literario” y los específicos son: “La identificación de estos procesos de asentamiento histórico literario de la Amazonía boliviana; investigar a través de la historia y la cultura de los benianos la literatura; investigar a través de la literatura beniana cómo se dio la ocupación en el Amazonas y su correlación con la Amazonía brasileña y mostrar la literatura beniana (también) configurada como Amazonía y expresión literaria de ese territorio”.

Su propuesta enfatiza y exalta mitos y leyendas antes del contacto con los colonizadores españoles; habla de El Dorado y la cultura del agua que corre el riesgo de perderse. Su trabajo nos permite comprender el contexto amazónico del hombre, la naturaleza y el mito, a la luz de las literaturas de los países que integran la gran región amazónica. Así, “la oferta literaria de la Amazonía beniana podría ayudar a comprender a otras concepciones de la Amazonía no restringidas a un solo país, pero si a la pan-amazónica”.

Durante su exposición, Saulo se apoya, entre otros, en tres obras y autores: Siringa, de Juan B. Coimbra; Inundación, de Luciano Durán Böger, y Los Reinos dorados, de mi autoría, traducido al portugués por Saulo, obra sobre la que afirma que leerla “es sumergirse en una época mítica de los habitantes de la selva, las civilizaciones indígenas de la Amazonía boliviana”.

Luego de leerlo se comprende mejor que existe en la Amazonía un carácter distinto de mirar, de sentir, de nominar, de soñar y de poetizar el mundo exterior y el interior. Y en cada escritor amazónico ese carácter se vuelve particularísimo. En el departamento del Beni, ese carácter poético que nos distingue, que nos identifica, está marcado por las aguas, por la lluvia, por las zanjas, por los atajados, por las lagunas, por los arroyos, por los curiches, en fin, por los ríos mismos y en especial por el Mamoré, el río madre, el río columna vertebral de nuestro ser amazónico.