octubre 31, 2007

HERVIDERO RAPSODIAL/ KLAIR AQUILA

CRITICA AL II ENCUENTRO INTERNACIONAL DE ESCRITORES, JULIACA 2007






HERVIDERO RAPSODIAL







Por Klair Aquila






Es como del quien se masturba con la almohada,
y entre sus piernas
caballo blanco, la masturbación

El aspecto vomitivo fue, asistir al II Encuentro Internacional de Escritores, Juliaca 2007, que se proponía a crear o contribuir la conciencia crítica del participante o lector, pero a saber: La polémica sirvió para que algunos de nosotros, tontamente, pensáramos que la discusión podía crecer y ganar altura; sirvió para que picáramos los anzuelos de diversos escritores que querían hacernos saber lo descontentos que estaban de su suerte; sirvió para que nuestros antagonistas de la literatura (ANEA San Román) obtuvieran su ansiada cobertura a costa de organizar este encuentro (deseo cumplido); sirvió para que enunciaran su visión muy decrépita y discriminatoria de la literatura puneña; sirvió para catapultar por cualquier vía, penosa, aunque a las nuevas carreras literarias de jóvenes como nosotros; sirvió para que se publicaran más agravios; sirvió para darle tribuna a los “oxidados” zampones; sirvió para sacar del olvido a poetas de dudoso numen; sirvió para el ejercicio del más descarado autobombo: ANEA San Román. Sirvió, en fin, para calentar la sangre y provocar un desembalse de todo orden de resentimientos.

Pero, sin duda, sirvió para divertir y horrorizar a los lectores. Y sirvió, por último, para hacerme reír con ganas y, en forma simultánea, para hacerme sentir (al igual que muchos, me imagino) enormemente apenado y desazonado. Y en tanto, quienes participaron en esta polémica vacía de vagas palabrerías, sólo han pintado retratos de sí mismos a través de sus palabras. Con lo que dijeron y con lo que callaron, con claras o absurdas tesis literarias, unos y otros ensayaron su “fe embrutecedora”, y algunos pocos que miramos callados, por último, nos sirvió para hacernos reír con ganas y en forma simultánea, y ¿se debe uno reirse tanto?, porque se debe estar apenado y desazonado con obvia actitud culpable; empero. ¿No se debió evitar el roche de estos alcornoques? ¡Qué mentes mastusbatorias estuvieron, ahí! Y así, disimulando su gambeta: II Encuentro de (...) ANEA San Román.

No se preocupen, sólo se volverán anécdotas, las ofensas vertidas por los asistentes o quizá (es lo más probable) se desmenucen con el viento como los vacíos y calcinados carapachos de los cangrejos. Sin embargo, y lo digo sin la menor animosidad, tampoco soy timorato, para callar esto; nada halaga tanto como que alguien nos insulte con tanta mezquindad y desesperación, aunque pobre este, Filonilo Catalina. Hasta hace pensar que algo bueno de uno ha de estar molestándolo. Lejos de las posiciones de quienes aquí intervenimos, lejos de las flamantes simpatías y antipatías, con los chilenos, sólo quedarán recuerdo de su visita (lo único que realmente importa), si es que algo queda.

Éste, arequipeño de paparruchas: Filonilo quiso injustamente comparar las obras o textos poéticos de los que le antecedieron en su lectura, con el caballo blanco de su culo. Bueno, ya me di cuenta que estamos en el tren de odiosas comparaciones. Y en mi poesía (Paranoia, Licnobio, u otros) porque no hacer comparaciones con esas composiciones que la hacen a (gitanitas, plantitas, cerritos y otras pampitas), pero no es necesario hacer comparaciones, ¿para que?, porque el correr de los años se encargará de decidir su validez. ¿Qué obra de los escritores puneños actuales tiene posibilidad de sobrevivir? ¿Qué texto poético se seguirán leyendo y cuáles permanecerán como un vetusto recuerdo de "lo que debía hacerse"? El tiempo sabrá decidir. El tiempo, implacable a la hora que se hacen vacías; cuando estos fenecerían.

En tanto y mientras, pasada este espectáculo de sonambulismo, ha llegado la hora de decir como en el poema de Juan Gonzalo Rose: querido cuerpo mío, continuemos viviendo. Y con ello adherir mi verso: Quien no sabe que vive en el sueño, esta mañana no sabe, si es la vida o la ilusión, porque alguien que muere por morir es el hombre viviendo su sombra. (Klair Aquila).
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http://youtube.com/watch?v=KLJRz3T6UPg

octubre 22, 2007

"LOS PASOS LEJANOS" TRIBUTO ROCK A CÈSAR VALLEJO

“LOS PASOS LEJANOS”
Bandas de Rock Peruano lanzan disco Tributo a César Vallejo

El disco “Los Pasos Lejanos”, Tributo Rock a César Vallejo, es una nueva iniciativa musical del productor y difusor radial Juan Carlos Guerrero, periodista estrechamente vinculado al Rock Peruano, quien a través de su sello discográfico ZONA103 Records y gracias al auspicio del Centro Cultural de España logra editar esta nueva placa.

“Los Pasos Lejanos”, reúne a 15 bandas de la escena rockera peruana que a su estilo musical y en base a su propia percepción artístico-literaria respecto a la obra de César Vallejo, logran convertir en canciones de rock igual número de poemas del reconocido poeta nacional.

“Los Pasos Lejanos”, Tributo Rock a César Vallejo es un tributo inédito en nuestro país ya que hasta hoy solo artistas folklóricos y trovadores habían realizado homenajes musicales con los poemas del gran vate nacional.

Este Tributo Rock tiene por finalidad acercar la literatura clásica nacional a una mayor cantidad de público y motivar el interés de los más jóvenes por el legado artístico de César Vallejo utilizando como vehículo la música moderna, ya que su obra poética contiene elementos que forman parte importante del acervo cultural contemporáneo del Perú que todos debemos conocer.

Una de las metas del productor de “Los Pasos Lejanos”, es que este disco se difunda y distribuya no solo entre los adeptos al rock, si no también en los centros educativos del país así como en círculos culturales tanto de nuestro medio como del extranjero donde el legado literario y cultural de César Vallejo ha dejado huella a través de los años.


Con el ruego de su difusión


Atentamente


Oficina de Prensa
ZONA103 Records
Telf. 99254498






PROGRAMA:



TRIBUTO A CÈSAR VALLEJO




1.- Rafo Raez y Los Paranoias...
Vallejo Blues : Poema LXXIV de Trilce


Uno de los artistas mas representativos del rock peruano contemporáneo con una discográfica rica en variedad musical. Su sensibilidad artística le ha permitido integrar su música con varios géneros musicales. Tiene una exitosa experiencia musicalizando poemas de José Watanabe

2.- Retrovisor
Fresco


Joven pero experimentada banda de la escena roquera local. Su música esta influenciada por cantautores del rock clásico argentino y bandas inglesas.

3.- Campo de Almas
Heces

Dentro del amplio espectro del pop rock nacional es una de las bandas importantes y de mayor exposición internacional. Su música y videos han aparecido permanentemente en cadenas musicales de prestigio internacional como MTV Latinoamérica.


4.- Extraño Deseo (Trujillo)
Lluvia

Banda fundamental en la escena Indie-dark de Trujillo. Con varios años de trayectoria reconocida por los medios de prensa de su localidad se ha convertido en uno de los clásicos del rock contemporáneo en el norte del país.

5.- Voz Propia
Piedra Negra sobre Piedra Blanca

Que duda cabe una de las bandas mas importantes del rock independiente de nuestro medio con una vigencia que sobrepasa los 20 años de carrera artística. Iniciadores del movimiento subte en nuestro país. Fue nombrada la mejor banda del rock peruano del 2006

6.- PunkWaro (Cuzco)
Santoral

Una de las bandas de rock más importante del Cuzco en los últimos años. Forma parte de la nueva hornada de artistas independientes del punk rock de ese departamento sureño caracterizados por su actitud de defensa e identificación permanente con los valores culturales locales.


7.- El Aire
Amor Prohibido


Importante banda de rock experimental de los 90’s que marco una etapa importante en la escena roquera local al proponer una manera totalmente ecleptica de hacer rock en nuestro medio. Es la primera banda peruana que edito un álbum triple con su musica.

8.- Arcana
Los Heraldos Negros

Joven banda con dos álbumes editados, perteneciente a la generación GRUNGE del rock peruano. Sin embargo ha sabido no encasillarse en su género consiguiendo desempeñarse en ámbitos como el rock and roll y el electro rock.



9.- Distorsión (Arequipa)
Masa

Banda arequipeña de heavy metal que apareció a finales de los 90’s y cuyo trabajo renovó la escena metalera de su ciudad por su propuesta en el contenido de sus letras y ritmos. Fue una de las primeras bandas provincianas de la generación noventera que se hizo de un nombre en la capital de la republica.


10.- Juanito C. Bueno
Pregón Calórico : 999 calorias Poema XXXII de Trilce

Joven músico, escritor y periodista cuya característica principal es graficar las letras de sus canciones como si se tratara de un cuento o historia que se le lee a un auditorio.


11.- Cecilia Zero
Ágape

Joven cantante y escritora. Ha publicado dos libros de su autoría con singular éxito en el medio literario local. Su vocación y gusto por la música y las letras la ha llevado a participar de este tributo.


12.-Maresantos (Chiclayo)
Desnudo en Barro

Sin duda la banda de Dark-pop mas importante de su localidad y con una gran cantidad de seguidores de su estilo en Lima. En su momento fueron catalogados como los sucesores natos de la mítica banda nacional Dolores Delirio.


13.-Confianza
Alejandro Susti


Experimentado músico y escritor miembro de la generación de los 80. A lo largo de los años ha mantenido una incansable participación en la escena roquera local y vigente su estilo de música basado en el rock clásico.

14.- Los Drugos
España aparta de mi este càliz

Peculiar banda cuya característica principal es presentarse disfrazados en un versión “barroca” de los míticos personajes de la película La Naranja Mecánica. Su estilo desenfadado de vestir así como su música que fluye entre punk y el pop rock los ha convertido en “una banda diferente” en la escena roquera local.


15.- Inerciados Pusilanimes
Altura y Pelos

Joven banda de la escena local que gusta de aplicar en de sus canciones una temática literaria ya que sus miembros se encuentran estrechamente relacionados con el mundo de las letras. Su estilo podría definirse como un pop rock alternativo.

octubre 18, 2007

¿ADIOS A LAS ARMAS? (UNAS PALABRAS POR JUAN RAMÌREZ RUIZ/ BERNARDO RAFAEL ALVAREZ

¿ADIOS A LAS ARMAS?
(unas palabras por Juan Ramírez Ruiz)

Bernardo Rafael Alvarez

Apunte Juan Ramìrez Ruiz de Humareda.
Juan Ramírez Ruiz nació en Chiclayo en 1946. Tenía 24 años cuando publicó “Un par de vueltas por la realidad”. Este libro, tengo entendido, debió haber salido al mismo tiempo que el de Jorge Pimentel, “Kennacort y Valium 10”, como una suerte de proyecto conjunto (este era el espíritu del Movimiento Hora Zero, ajeno a cualquier protagonismo individual). La falta de recursos de un lado y alguna otra razón que desconozco, hicieron que el autor de “Palabras urgentes” y teórico de la Poesía Integral se resignase a ver su obra impresa un año después. Calendarios diferentes, títulos distintos, voluntades acaso ya diversas, pero una sola verdad: ambos, como la espada de Pizarro en la Isla del Gallo (perdóneseme el símil tan desproporcionado e inconveniente) marcaron el deslinde entre pasado y futuro.

Seis años después apareció “Vida perpetua”. Un libro, en el aspecto formal, extremadamente distinto. Si el primero significó la incorporación del lenguaje popular a la poesía, el segundo representó una profunda y sorprendente incursión de la poesía en el lenguaje mismo. Fue, además, una invitación al lector a participar en la fiesta de la creación. Se trató de la primera gran expresión de estudio y experimentación que Juan se había propuesto y puso en práctica en “un solitario y franco proceso de ruptura.”

Luego vino lo que es, creo, el más importante y ambicioso libro escrito por el fundador de Hora Zero: “Las armas moldas” (Arteidea editores, 1996). Un libro que ofrece múltiples lecturas: poética, política, social, antropológica, lingüística. Un libro que no es para ser leído en una sola tarde. Consta, por lo demás, de doscientas treinta y cuatro páginas y contiene setenta poemas de excelente factura, muchos de los cuales son la suma de varios poemas lo que hace que la cuenta arroje un total de ciento treinta y ocho. El conjunto es lo que me atrevería a llamar una expresión de épica y lírica contemporáneas. Puede ser leído (otra vez perdóneseme, ahora por la irreverencia) como la Biblia: en el momento que usted desee, comenzando por la página que elija ex profeso o al azar, al revés o al derecho, de manera integral o interesándose solo en versos sueltos.

Paralelamente a la sucesión de los poemas, el libro ofrece el desarrollo de un trabajo de, al mismo tiempo, investigación y creación en el plano estrictamente lingüístico. A partir de una suerte de prólogo conformado por el antecedente de los “andigramas”, Juan Ramírez Ruiz se entrega a la tarea de sustentar una propuesta sumamente ambiciosa y audaz: crear la escritura de lo que denomina la dimensión hanan que no es sino (en sus propias palabras) “la dimensión suprema: la energía reunida del protoplasma, de la biosfera; el paraíso terrenal y cósmico poblado por las diáfanas teleologías de las altas elaboraciones mentales y espirituales de todos los hombres”. El resultado que obtiene es un catálogo de signos, o signario, llamado alfagrama, cuyos valores semánticos tienen carácter verbal, numérico, musical, cromático, geométrico y algoritmico.

Hagamos memoria. Hora Zero quiso significar una “toma de situación y de conciencia” como posición considerada ineludible. Planteó una nueva actitud frente al acto creador; señaló la necesidad de estudio, de investigación, de descubrimiento y de renovación; afirmó la urgencia de una poesía que no invite a la conciliación ni a pacto con las fuerzas negativas y se impuso el compromiso de escribir una poesía viviente que no deje escapar nada al trayecto del poeta como hombre momentáneo sobre la tierra. Su aporte fue o, mejor dicho, es la Poesía Integral como una totalización, donde se amalgame el todo individual con el todo universal.

Ûltimo libro de Juan Ramìrez Ruiz.
A eso corresponde, estrictamente, “Las Armas molidas”: a lo que es la Poesía Integral, por su afán totalizador y su propuesta de un nuevo lenguaje como cabal signo de ruptura. No solo representa el punto culminante del desenfreno creador de Juan Ramírez Ruiz, es decir, el producto más elevado de una verdadera orgía de trabajo protagonizada por el luminoso habitante de aquel casi oscuro 444 del jirón Ancash (donde vivió durante un gran número de años). Es también la rigurosa realización del proyecto llamado Hora Zero.

Nos muestra, además, que, en verdad, la poesía no es solo ofrecimiento de complacencia, sino la búsqueda de lo imposible, el abrir las puertas de la utopía. Es la creación plena!

Con este libro, Juan Ramírez Ruiz nos dice, con certeza, que la inmolación de sus días (literalmente y al puro estilo horazeriano –cf. Palabras urgentes) no ha sido sacrificio vano, sino fecundo ejercicio vital. Por ello, lo digo creo que también con certeza, Juan sigue dando guerra: la exultante guerra de la poesía, cuyo objetivo no es la muerte sino la vida.




















octubre 16, 2007

II ENCUENTRO INTERNACIONAL DE ESCRITORES-JULIACA/ VICENTE BENAVENTE CALLA

II ENCUENTRO INTERNACIONAL DE ESCRITORES-JULIACA
VICENTE BENAVENTE CALLA
I N V I T A C I O N

La Comisión Directiva de la Asociación Nacional de Escritores y Artistas – San Román, convoca a todos los narradores, poetas del país y del extranjero (como invitados especiales), con motivo de desarrollarse del 25 al 28 de octubre

el II ENCUENTRO INTERNACIONAL DE ESCRITORES “JULIACA 2007”,

VICENTE BENAVENTE CALLA.

Organizan:

Asociación Nacional de Escritores y Artistas, San Román - Juliaca

Grupo Editorial “Hijos de la Lluvia”

LagOculto Editores

Revista de literatura LA RAMA TORCIDA

Taller de creación literaria “La tribu de los espantapájaros”

Auspician:

Honorable Concejo Provincial de San Román – Juliaca(Capital de la integración Andina).

Universidad Andina Néstor Cáceres Velásquez (Sede central – Juliaca).

Dirección Regional de Educación Puno UGEL – San Román – Juliaca

Participan:

Bolivia, Chile, Argentina, Colombia, Ecuador, España y Perú

Temario General:

Las ponencias a presentar deben circunscribirse a la siguiente propuesta metodológica:

1. Problemática de la teoría literaria hispanoamericana.

2. Discursos canónicos (narrativa, poesía, teatro, y ensayo).2.1. Discursos no canónicos (discursos híbridos, literatura infantil, literaturas étnicas, testimonio y performance).

3. ¿Existe una crítica para revalorar la literatura hispanoamericana?.

4. ¿Cuáles son los criterios para escribir la historia de la literatura andina?.

5. ¿Cuáles son los escritores importantes en la literatura andina contemporánea?.

6. ¿Cuál sería el esquema adecuado para escribir una nueva literatura hispanoamericana?.

7. Análisis de la literatura y problemática social en el Perú.

8. La novela contemporánea de hispanoamérica.

9. El cine y la novela hispanoamericana.

10. Literatura regional.

11. La nueva generación poética de hispanoamérica.

12. Narrativa breve en hispanoamérica: el cuento.

13. Literatura y testimonio.

14. Desarrollo de la Crítica literaria de hispanoamérica.

15. Literaturas hispanoamericanas contemporáneas: los 90 y el post dos mil.

Ponencias:

Al momento de la lectura, cada ponente deberá entregar un disquete con una copia del archivo de su ponencia. Los organizadores compilarán las ponencias para la publicación correspondiente en formato impreso como testimonio del II Encuentro Internacional de Escritores “Juliaca 2007” Vicente Benavente Calla.

Las sumillas deberán ser enviadas a

desvarioliterario@hotmail.com

o

info@juliacamia.com

considerando las fechas mencionadas.

La fecha límite para enviar sumillas vence el 10 de octubre, luego se hará llegar una respuesta al ponente el 13 de octubre de 2007. Una vez notificada la aceptación de ponencia, el participante deberá confirmar su presencia antes del 18 de octubre de 2007 para su inclusión en el programa.
Se contemplará un cobro de inscripción que otorgará derecho a participar de todas las actividades académicas, culturales y de integración, y a certificados, carpeta, credencial, papelería, materiales y beneficios que por convenios obtenga la gestión del evento.

Los cobros por inscripción varían entre 20 y 50 nuevos soles de acuerdo a la procedencia o nivel profesional del participante.

Toda consulta o duda sobre estas pautas se deberán presentar a la Comisión responsable del evento al correo mencionado.
Los interesados en presentar ponencias en el II ENCUENTRO INTERNACIONAL DE ESCRITORES “JULIACA 2007”, VICENTE BENAVENTE CALLA, deberán enviar una sumilla de su trabajo respetando el siguiente formato:

1. Título explicativo.

2. Descripción de la ponencia (entre 15 o 20 líneas).

3. Propuesta de la ponencia (máximo 10 líneas).

4. Bibliografía básica (5 títulos).

5. Palabras clave (máximo 5).

6. Reseña del autor (apellidos y nombres, lugar de origen, institución, grado académico, correo electrónico, teléfono).

Actividades:
- Comisiones de trabajo (a la brevedad se brindarán mayores detalles)

- Mesas de Lectura.- Mesas de debate.

- Presentaciones de libros.- Evocaciones.

- Ponencias.

- Presentación de Talleres.

- Micrófono abierto (lectura franca)

- Espectáculos musicales.

- Charlas.

- Módulos de venta de libros y otras publicaciones.

- Presentación de revistas, libros, fanzines, etc.

- Exposición de artes plásticas.

- Video. (Reproducciones sonoras).

- Presentación de Danzas típicas.

- Teatro

- Café Literario.

- Perfomances, y otros.

Inscripción:

Estudiantes : S/. 20.00Docentes : S/. 30.00Público en general : S/. 20.00Los ponentes están exonerados del pago de inscripción. La participación de ponentes y asistentes al II ENCUENTRO INTERNACIONAL DE ESCRITORES “JULIACA 2007”, VICENTE BENAVENTE CALLA, será certificada.

Los asistentes podrán contactarse a

desvarioliterario@hotmail.com

o

info@juliacamia.com

El PROGRAMA OFICIAL a seguirse en el II Encuentro Internacional de Escritores “Juliaca 2007” Vicente Benavente Calla, se entregará a los participantes el día de su inauguración, para su orden, hora y fecha de desarrollo.

NOTA: Los organizadores invitan a participar a editoriales y librerías, más allá de sus modalidades, a exponer módulos, con posibilidades de venta.
mayor informacion en

www.juliacamia.com/anea

ASQUEROSAMENTE PERDIDO/ ARMANDO ARTEAGA (MINIFICCIÓN)


ASQUEROSAMENTE PERDIDO

Por Armando Arteaga




No volveré a beber más en mi vida.
James M. Cain.
EL CARTERO SIEMPRE LLAMA DOS VECES


Por una autopista de gran intensidad de tráfico urbano, dos vehículos que iban a excesiva velocidad chocaron violentamente. Eran dos automóviles lujosos que quedaron como un par de acordeones. Sus dueños que manejaban estrepitosamente terminaron a salvo, sanos, sin ningún rasguño que lamentar.

El accidente fue un desastre escandaloso. El automóvil azul lo manejaba un hombre y el automóvil rojo lo manejaba una mujer.

-¡Es un milagro!. ¡Dios existe! –exclamó la mujer, todavía asustada por lo sucedido-. ¡Estamos vivos!.

-¡Es un milagro! –aceptó el agnóstico hombre algo acongojado. ¡Nuestro destino estaba escrito así!.

-Sí, es verdad –dijo la mujer-. Lo que nos queda de vida, a los dos, es hacer el amor como locos, ese es nuestro destino.

Fue entonces que el hombre volvió a la realidad luego del bochorno del accidente. Miró a la mujer que era bellísima e imaginó varias noches con ella haciendo el amor en un fabuloso hotel de 5 estrellas en el Caribe o en una isla solitaria.

La mujer se acercó hacia el lugar donde yacía su automóvil rojo destrozado, y curiosamente en el asiento posterior dormía una botella de Black Bottle Scoth Whisky que permanecía llena e intacta a pesar de la brusquedad de la maniobra ocurrida. La mujer cogió y abrió la botella de whisky, y se la entregó al hombre:
-Bebe, celebraremos este encuentro de nuestro destino: ¡haremos el amor como locos en lo que nos queda del resto de nuestras vidas!.

El hombre entusiasmado bebió un largo trago de la botella de whisky que estaba estupenda. La mujer esperó. Y luego, tomó la botella y la cerró.

-¿Qué? - preguntó el hombre-. ¿No vas a beber por este encuentro de nuestro destino?.

-No -le dijo la mujer-. Yo creo que tú ya has bebido más de la cuenta. Esperaré que venga la policía para que ordene tu “dosaje etílico”.


Del libro: "Cuentos de cortometraje".

octubre 15, 2007

DE DIEGO MEJÌA A SANTOS VILLA, UNA HISTORIA DE METÀFORAS Y ACORDES/ BERNARDO RAFAEL ÀLVAREZ

LA LITERATURA EN ANCASH:

CULTURA DE PALLASCA:


DE DIEGO MEJÍA A SANTOS VILLA, UNA HISTORIA DE MATÁFORAS Y ACORDES

Bernardo Rafael Álvarez


Pallasca –lo escribí hace algún tiempo- es “un pueblito de la sierra ancashina, bello, saludable y acogedor, por sus paisajes infinitos, por su clima y por el calor imantado de su gente, que es capaz de atraer al más distante de los humanos, convirtiéndolo en huésped perpetuo de su corazón. “

La historia
Su historia se remonta a los primeros tiempos de la Conquista. Estudios serios indican que su nombre provendría del cacique Apollacsa Vilca Yupanqui Tuquiguarac, “indio noble que prestó importantes servicios durante el paso de los primeros conquistadores”, por lo que habría recibido escudo de armas, según señala el historiador Félix Álvarez Brun, en su libro ANCASH, una historia regional peruana.[1]

En Pallasca han ocurrido hechos que merecen ser resaltados. En las aguas del Río Tablachaca (antes Andamarca) fue arrojado el cadáver de Huáscar, el último heredero legítimo del Imperio Incaico. En dos oportunidades, a fines del siglo XVI, recibió la importante visita de Toribio de Mogrovejo, entonces la más alta dignidad de la Iglesia Católica en el Perú y después proclamado santo, en diciembre de 1726. En la etapa de la Independencia aportó su cuota de hombres y provisiones para el Ejército Libertador. Cuando se produjo la invasión chilena, puso de manifiesto su arrojo y patriotismo negándose a cumplir las órdenes de los jefes militares enemigos y, más bien, se enfrentó, en desigual batalla, dando excepcional muestra de dignidad que le costó, como heroico saldo, decenas de muertos y heridos.

Años antes de aquel conflicto fue visitada, en épocas distintas, por dos importantes estudiosos europeos cuyos testimonios fueron insertados en sendos libros que son fuente obligada de consulta: Charles Wiener, autor de Peru et Bolivie, y Antonio Raymondi, que escribió El Departamento de Ancasch y sus riquezas minerales. El francés Wiener, entre otras descripciones y alusiones, se refiere al río Tablachaca y expresa que se trata de “uno de los sitios más notables en la historia del Perú”, porque allí “fue degollado cerca del puente por orden de su hermano sublevado”, Huáscar el último inca legítimo. Raymondi advierte que el distrito de Pallasca “es el más estenso (sic) de todos los de la Provincia” e intuye, por algunas evidencias encontradas, que debió haber sido importante durante la dominación española; resalta la belleza del panorama que se aprecia desde Santa Lucía donde, dice, “hay una pequeña capilla”, y llega a conocer el subterráneo (que nosotros cuando niños llamábamos “infiernillo”) ubicado en una vivienda al frente del templo de San Juan Bautista. Pero lo más significativo quizás sea el haberse dado cuenta que, como en otros distritos (a diferencia de Corongo, que entonces formaba parte de nuestra provincia) en Pallasca solo se habla el idioma español, lo cual, según su personal apreciación, hace que los habitantes de estos pueblos sean más tratables y cariñosos”. La ausencia del Quechua -que no tuvo tiempo de arraigarse en los pueblos de nuestra Provincia (y que, por cierto, deberíamos lamentar)- se debe a que –como señalaron investigaciones lingüísticas ulteriores- el idioma nativo en esta región fue, en realidad, el Culli que prácticamente sucumbió ante la irrupción sucesiva de incas y de españoles y del que solo han quedado desperdigadas o “chapreadas” (que es como se dice en pallasquino) algunas expresiones que son empleadas con frecuencia (pienso ahora en la particular eufonía de los topónimos Conshyam, Mushyuquino, Pocata, Shulgarape…)

La poesía

Si aceptamos que –tal como afirma el historiador Álvarez Brun- Pallasca es la antigua Andamarca, aquel pueblo más o menos cercano al río en que, sabemos, fue arrojado el cuerpo sin vida de Huáscar, el último Inca legítimo, entonces tendremos que admitir que la poesía pallasquina comienza con el poeta sevillano Diego Mejía de Fernangil. La segunda parte de su Parnaso Antártico, llamada “Égloga Intitulada El Dios Pan…”, tiene, entre otros, estos significativos versos:

“Aquí, señor don Diego, en Andamarca,
donde el Quisquis, y el gran Cilicochima
cortaron la cabeza a su monarca,
junto al arroyo do con vena opima
de rubicunda sangre dio a su vida
el sin ventura Guáscar fin y cima,
me hallo a la sazón que a su querida
Tetis inclina la jornada Apolo,
Dejando esta región oscurecida.”

Es decir, la poesía pallasquina (digo, aquella escrita en Pallasca) tendría su registro histórico a partir del siglo XVII. Pero para sustentar esta afirmación habría que darse el menudo trabajo de recurrir a la Biblioteca de Paris que es donde, tenemos entendido, se encuentra el texto completo del largo poema, y además hacer un seguimiento al itinerario biográfico de aquel medio desconocido vate. Esto permitiría sumar argumentos a la tesis pulcra y minuciosamente expuesta por Álvarez Brun, nuestro laureado escritor.

Pero por ahora solo nos importa ocuparnos de otros poetas, los creadores emblemáticos de Pallasca: Víctor H. Acosta y Teófilo Porturas que, por cierto, merecen permanecer en nuestra memoria, alimentando el lado noble de nuestro orgullo. Olvidarlos sería injusto, oprobioso y ofensivo a la dignidad.

La única vez que ví a don Víctor H. Acosta fue el día en que lo conocí. Yo tenía doce años. Ocurrió cuando –como lo he contado en una crónica- “alumnos y profesores de la 293, mi escuela, habíamos ido en “excursión” a la capital de la provincia y allí, fastuosos, en una velada literario musical hicimos una representación teatral en la que yo aparecía como “Willac Umu”, usando como parte de la indumentaria una capa probablemente del San Juan Bautista de mi tierra”. Mi padre, el maestro Rafa, era mi profesor y, por tanto, también fue de la partida. Yo siempre “paraba –como se dice- pegado a él”. Y recuerdo que en la Plaza de Armas de Cabana se produjo el encuentro: él y Víctor H. Acosta. La bella Iglesia de Santiago el Apóstol, mandada a construir creo que por el padre Ciro Palay, imperturbable y blanca permanecía allí apuntando al cielo en la esquina sur oriental. Y, claro, el niño zonzo -o sea yo- también en el lugar, pero mirando al suelo. Bien peinado, el poeta vestía un terno plomo a rayas correctamente abotonado, y con corbata. Supe que le gustaba jugar billar y que no confiaba en los tacos que se ofrecían en el establecimiento a donde acudía a relajarse con sus amigos; por eso prefería llevar el suyo, uno de color marfil que en aquellos momentos portaba y se ufanaba en mostrar a mi padre. Yo, por supuesto, ya sabía que se trataba de un poeta porque tuve oportunidad de conocer su único libro, Sentidas, que fuera publicado allá por el año 1929 cuando su autor, según tengo entendido, aún era adolescente (por lo menos eso es lo que se nota en la foto que aparece a la vuelta de la portada). Lo que nunca llegué a saber era el porqué de aquella “H” en su nombre (muchos años después alguien llegó a decirme –naturalmente, sin haberlo podido confirmar- que en realidad correspondía a su apellido paterno, el que por alguna de esas misteriosas razones o sinrazones que solo los poetas entienden, terminó reduciéndose a la inconfundible sonoridad de esa letra a la que le dicen muda). El librito, prologado por don Teófilo Porturas (con quien compartió experiencias de aprendizaje y creación en Trujillo, frecuentando en su adolescencia a poetas y escritores del Grupo Norte, como Antenor Orrego), fue impreso por la Imprenta Torres Zumarán del jirón Sandia 111, y yo lo obtuve gracias a que mi amigo Lucho Aparicio me lo regaló –después de haberlo encontrado junto a un número indeterminado de otros ejemplares, en el “terrado” de su vivienda- cuando formábamos parte del Club Infantil “Los Inseparables” (acerca del cual ofrezco publicar pronto una crónica, pues tiene una significación altamente sensible en mi vida). Don Víctor, el querido autor de Ave que muere, su poema más conocido y celebrado especialmente por las damas pallasquinas, nació en Pallasca, pero hasta sus últimos días vivió en Cabana, donde nacieron sus hijos y quedó su recuerdo.

Sentidas, el poemario de don Víctor, es un libro de formato pequeño, diríamos “de bolsillo”. Está compuesto por cuarenta y siete poemas bellos y bien escritos, que se caracterizan por una extraordinaria riqueza expresiva, además de musicalidad y ternura. En ellos se pone de manifiesto poco discretamente la presencia de Rubén Darío; es que el Modernismo había poblado el continente, entonces. Pero también –como muy bien apunta Teófilo Porturas en el prólogo- hay algo de Vallejo. Un poema conmovedor es aquel titulado Yo nací para cantar, en el que encontramos estos hermosos versos:

“Canté en las sombras de mi desventura
El recio golpe de mis amarguras;
Canté, porque he nacido
Para ser un Acosta dolorido.

Así fui lanzado al podridero
De esta vida mezclada de asperezas!
¡Y en tan crudo y horrendo podridero
siempre sigo cantando mis tristezas.”

Don Teófilo Porturas administraba una muy modesta tiendita y nuestros padres cuando nos pedían que hiciéramos alguna compra nos decían: "anda a la tienda del poeta" y, créanlo, la eufonía de esta palabra nos conmovía de veras. El espíritu de aquel hombre era vivaz. Su sueño era que Pallasca elevara su nivel cultural. Y, en efecto, procuró que ello ocurriera, y vio que a los niños y jóvenes había que entregar las llaves del futuro, formando su personalidad, enriqueciéndola. El camino, probablemente difícil, había que recorrerlo con un instrumento sin duda eficaz: la lectura. Por ello es que, junto a un grupo de trece pallasquinos (todos, como él, humildes) hizo todo cuanto le fue posible para dar el paso decisivo, irreversible, trascendental: fundar la Biblioteca Pública de Pallasca. Ansiosos y esperanzados, recurrieron a un paisano que hacía mucho años había partido a otra provincia, don Manuel Herminio Cisneros Zavaleta; él les ofreció y dio su apoyo: los libros de su colección privada los transfirió, en donación, a favor de su pueblo natal, y como reconocimiento a su calidad profesional de periodista y en gratitud por su alma noble y bondadosa, los entusiastas gestores de la obra decidieron darle su nombre a la Biblioteca que en esos momentos (1º de Mayo de 1957) nacía y que por un considerable número de años, domingo a domingo, abriría sus puertas para congregarnos a los niños y adolescentes de entonces, en un inolvidable ritual que nos hizo felices. Curiosos, ávidos, inquisidores, leíamos y leíamos, desde El Tesoro del Juventud hasta Cumbres borrascosas, de La vuelta al mundo en 80 días a El mundo es ancho y ajeno...Pulcramente vestido, con la cabellera más o menos larga peinada hacia atrás y con un brillo de gozo en los ojos, nos atendía, solícito, el fundador de aquel medio discreto templo de la cultura. Don Teófilo Porturas, poeta, publicó un solo libro cuyo más celebrado poema fue siempre Jardinera del silencio en el que decía: “Eres una compañía de recuerdos/ para mi pobre vida…”; “¿A dónde iré con mi manojo de locuras,/ en los ojos tórridos,/ aquí donde se renueva mi alma/ del retazo que tengo todavía de amarguras?”. Razones, probablemente económicas, hicieron que sus poemas que desde muchos años antes habían aparecido sueltos en algunas revistas y periódicos, recién en 1967 conformaran un volumen al que don Teófilo llamó Latidos; poemario cuyos versos –al decir del cusqueño José Gabriel Cosio- son “de melancolía y tristeza, de angustia y de desesperanza, con un sí que es no de agridulce”; y presentan también una poco habitual audacia creativa en el aspecto formal, insinuándose algo de Oquendo de Amat, por ejemplo, en versos como los que siguen:

“Mañana me bañaré en tus lagos
en mi infancia te he mirado a ti
tus tardes avanzan a suicidarse
en los maizales
lentamente.”

Conformado por treinta y ocho poemas, Latidos fue impreso por don Jesús Aguilar Segura, el honrado, solícito y diligente secretario de la Municipalidad Distrital, en la pequeñísima Imprenta del Concejo. Los niños de entonces, lo recibimos con alborozo y fue don Moisés Porras, Director del Colegio San Juan Bautista, quien nos dio las claves para comprenderlo. Así fue como pudimos, tempranamente, degustar el sabor asaz extraño de sus metáforas y descubrir en su novedoso ritmo algo así como la música de Pallasca compuesta, claro está, sin solfas ni acordes estridentes.


La música

Cierto, no son acordes estridentes los que hallamos en la música pallasquina. Y para hablar de ella debemos necesariamente referirnos a cinco nombres (como las líneas del pentagrama). Nombres de personas que contribuyeron con un aporte valioso: hacer que nuestra sensibilidad, a veces proclive a lo foráneo, se identificara con las manifestaciones artísticas nacidas en nuestros pueblos andinos. Su influjo, naturalmente, se sumó al que ejercieron nuestros padres y, por cierto, al que brotó de la belleza de nuestros paisajes, de lo glorioso de nuestro pasado y de la calidad espiritual de nuestra gente, la buena gente de Pallasca y sus costumbres (dos de las cuales, insustituibles, son el Toro de trapo con el pum, pum de la caja y la medio afónica melodía del pífano, y las Quiyayas, “telúricas y magnéticas” como habría dicho el inmenso César Vallejo). Estos nombres son: Pedro Gutiérrez, Ireno Aguilar, Julián Rubiños, Juana Díaz e Isabel Miranda.
Don Pedro Gutiérrez, “El Conshyamino”, nuestro folclorista invidente, cuando lo conocimos solía ubicarse en una de las bancas de la Plaza de Armas (casi siempre en la que da hacia la iglesia). Con un seseo muy particular, secundado por el acompañamiento jadeante de “su acordeón o concertina”, protegido por su poncho y sombrero, rodeado por los chiquillos del pueblo y –cómo no- vigilado por la “Repolla”, su mujer, entonaba huaynos y guarachas: “En el cielo las estrellas”, “Mi cafetal”...y “La piedra de mal rodar”, su canción emblemática
[2]. No faltaba -como en todas partes- algún mozalbete zamarro que –candorosamente perverso- le jugara una broma pesada, como presionar una tecla de su instrumento, alterando, así, la ejecución del tema musical; don Pedro se enfadaba por un instante, soltaba sin mucha convicción un carajo, pero inmediatamente sonreía y continuaba con la música. Nosotros nos alegrábamos con su alegría y nos conmovíamos con su emoción. La destreza que demostraba al hacer brotar las notas de su muy humilde instrumento, era la misma cuando confeccionaba las proverbiales “andaritas” (especie de flautas de pan hechas con cañas de carrizo), perfectamente afinadas como para pergeñar, en las noches de luna llena, las melodías inolvidables del “Zorro negro”; o para que Julio y “Shantel” -dos de sus principales usuarios- pudieran familiarizarse con la nobleza del arte órfico (su padre -nunca olvidado, especialmente por su cálido y generoso corazón-, don Santiago Zanelly, era, probablemente, el más entusiasta “cliente” de don Pedro). Durante las primeras décadas del Siglo XX, sabemos que la animación musical de las fiestas familiares del pueblo, más que la Victrola, corría a cargo de El Conshyamino. La aparición del retumbante “Pick up” prácticamente desplazó a ambos. La Victrola se convirtió en pieza ornamental o de museo y don Pedrito, tal vez invadido por una honda tristeza pero jamás deprimido, trasladó su centro protagónico a la Plaza, mas nunca se alejó de los corazones. Más que un personaje, llegó a ser un símbolo. Los pallasquinos lo guardamos en nuestra memoria y sabemos que él y don Víctor Alvarado, don Pancho Nina, don Lorenzo Paredes...forman parte de la identidad espiritual de nuestro pueblo. Hablar de Pallasca es no olvidarse de ellos, tanto como de El Chonta, de Tambamba, de Santa Lucía; de la “293” y sus entrañables “maestros”; del Toro de trapo, de las “luminarias” y del grog…A nosotros, por lo menos a nosotros, cuando niños, don Pedro Gutierrez nos dio una lección imborrable –como todas aquellas que se dan sin palabras, que se dan con el ejemplo: amen lo nuestro con todo el corazón.

Y el “pick up”, ese medio perverso personaje sin alma que a don Pedrito le mermó protagonismo, significó, valgan verdades, una importante contribución para que aquello de lo que estamos hablando se fortaleciese: la pasión por lo nuestro. Gracias a él más gente pudo acercarse a los ritmos y melodías del ande peruano (y, cómo no, también a los valses, las polcas, las guarachas, el mambo...). En las fiestas familiares y los “bailes sociales” se hacía presente a primera hora junto a las pesadas baterías o acumuladores. La Pastorita Huaracina (“La Soledad”, “Penitenciaría de Lima”, “A los filos de un cuchillo”, “Zorro, zorro”...) y el Jilguero del Huascarán (“Capitalina”, “Marujita”, “Al compás de mi guitarra”, “Cóndor Cerro”...) fueron una suerte de alimento espiritual precisamente en esa etapa en que todo se asimila: los primeros cinco u ocho años de la vida. ¿Quién nos los hacía escuchar casi cotidianamente? Ya lo adivinaron: don Ireno Aguilar. Desde su casa ubicada en la parte alta del pueblo, aún con discos de carbón, el “pick up” (probablemente el primero que llegó a Pallasca) hacía que nuestras mañanas o tardes, normalmente monótonas como en todo pueblo pequeño de la sierra peruana, tuvieran como aliño aquel almíbar que nunca empalagaba: los huaynos, las chuscadas, los chimayches...Por ello, don Ireno (el del molino de piedra con su “tararác” y su cárcamo y quién sabe con su “duende”) tiene un lugar preferente en nuestra memoria, la memoria del pueblo, porque -hay que reconocerlo sin mezquindad- su existencia fue, musicalmente, nutricia.
Como nutricia es, también, la de otro hombre que aparece nítidamente en la historia musical de Pallasca. El compositor y director de un conjunto musical (“Los mensajeros del Chonta”), una de cuyas canciones hizo abrir los ojos y la conciencia de muchos: “Señor Diputado”. Nos referimos, a quién más va a ser, a Julián Rubiños. La letra de ese tema (contestario, de protesta, turbulento) correspondía en verdad al sentir de un pueblo postergado por muchísimo tiempo; ponía en el tapete y la atención pública una necesidad y una esperanza: que Pallasca saliese del aislamiento para conectarse con los pueblos y ciudades más desarrollados. La exigencia era específica: queremos carretera. Pero también –recuérdenlo- reclamaba que quienes reciben el voto popular sepan ser dignos de él. Es decir, don Julián no solamente vio en el arte musical un medio para promover el entretenimiento, el gozo, sino una tribuna de denuncia y demanda. Es, lo decimos categóricamente, el compositor pallasquino por excelencia. El mismo cantaba sus canciones y dirigía a los integrantes del grupo de instrumentistas que lo acompañaban (“marco musical”, le dicen ahora). Don Julián tiene aún, gracias a Dios, el talento y el entusiasmo vívidos y fecundos, y podemos esperar más de él.
Pero no solo él puso la voz a sus composiciones. También una simpática jovencita (ahora respetable y hacendosa ama de casa, desde hace muchos años con residencia en Norte América) nacida en el distrito de Santa Rosa, Juana Díaz. Y es precisamente ella la que llevó al acetato el huayno al que nos hemos referido. Y ella es quien contribuyó grandemente a que Pallasca fuera conocida. Desde los coliseos (en boga hace varios lustros) y la radio, su voz repetía con orgullo y emoción el nombre de nuestro pueblo. Estamos hablando de la artista representativa de nuestra provincia, aquella que cantaba versos sentidos como estos: “En las pampas de Zarumilla hay un cadáver de quien será, seguramente de un pallasquino...”. Sí, pues: a ella le debemos mucho, pero –es lamentable que sea así- la hemos soslayado injustamente. Recordamos que alguna vez (fue en 1965, sin temor a equivocarnos) ella, con Julián Rubiños, “El cholo sufrido” y “Susanita ancashina” llegaron a nuestro pueblo y programaron una presentación en la 293, nuestra Escuela (esa que la modernidad ha tirado por los suelos); la respuesta fue adversa y nosotros, entonces aún en la infancia, sentimos dolor y experimentamos eso que hoy se llama vergüenza ajena. Estamos hablando, señores, de “La pallasquinita”. Ella y nuestro compositor Julián Rubiños merecen el homenaje y desagravio que Pallasca les debe por gratitud y justicia.
De Isabel Miranda hemos dejado de escuchar (su padre fue -lo conocimos- don Santiago Miranda; ¿se acuerdan de él?). En los años 60 grabó un disco (probablemente otros más, no lo sabemos), en el que –como está escrito en otra parte- se dibujaba musicalmente a Pallasca y su fiesta patronal, la Fiesta de San Juan Bautista. Un segmento de aquel tema musical decía: “Toque, toque don Pedrito su acordeón o concertina, para bailar por la Calle Grande con mi linda pallasquina...” Un tema hermoso, de auténtica creación -no como otros- según pudimos advertir, y muy bien cantado, que debiera merecer reiteradas reediciones y, sobre todo, ser difundido intensamente entre todos los pallasquinos, porque es como un himno que alimenta el orgullo y el cariño por la tierra que nos vio nacer y por su gente.
Concluyamos. Sin olvidar lo que significó don Alonso Paredes, maestro que cultivó y estimuló en los niños la simpatía por los valores del rico y altivo pasado de nuestra patria y considerando el aporte conmovedor de nuestros chirocos -Eleodoro Valdez y sus hijos, entre otros-, la aleccionadora aunque fugaz vida de la Estudiantina de la 293 y el entusiasmo de maestros como don Elio Machado (¿recuerdan las “veladas literario-musicales”?), ellos (Pedro Gutiérrez, Ireno Aguilar, Julián Rubiños, Juana Díaz e Isabel Miranda) constituyen el pilar sobre el cual la música folclórica de Pallasca se sustenta. Después de ellos han venido y seguirán llegando nuevos y muy buenos valores, no tenemos por qué dudarlo. Santos Villa Laureano es uno y creemos que de los mejores (importante es también la labor de difusión que hace a través de una emisora de la Capital). Hay que agradecer que sea así, pero estimulémosles sin reservas y con alegría. Porque, ¿saben una cosa?, el arte nos hace mucho bien, alimenta los buenos sentimientos y robustece la dignidad de los pueblos.

Coda
Lo dicho hasta aquí pretende tres cosas: primero, afirmar que la gente humilde ha sido siempre, como en casi todos los pueblos, la forjadora de nuestra identidad espiritual; en segundo lugar, ser una suerte de suplemento nutricional de la memoria: recordar, señores, enriquece y honra, y, en tercer lugar, insinuar una exigencia: sintámonos orgullosos de ser pallasquinos. Es, además, un trazo inseguro, un apunte precario, incompleto, de lo que debería ser la acuarela que retrate a Pallasca, Pallasquita linda (como la llamaba don “Moshe” Huerta), la tierra de los chupabarros; aquella que está a muchos kilómetros de distancia de mis ojos pero que, sin embargo, siento que palpita cotidianamente en mi corazón.
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[1] “Al César lo que es del César”: A la importante contribución del historiador Álvarez Brun (quien ha escrito el más completo, riguroso y bello libro sobre la historia de Ancash y, por ende, de Pallasca), debemos sumar el aporte pionero del normalista conchucano Alonso Paredes y el candoroso entusiasmo de nuestro paisano Manuelito Alvarado. Gracias a ellos pudo reconstruirse gran parte de nuestro pasado histórico. Soslayarlos sería injusto.

[2]“Ojalá nayde vuelva a caer / en esa piedra de mal rodar. / Y si otro día la vuelvo a hallar / de Mushyuquino la voy a botar…”


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octubre 11, 2007

VIERNES LITERARIOS DE JUAN BENAVENTE

JUAN BENAVENTE Y BOULEVARD QUILCA

presentan:


Viernes Literarios

OCTUBRE 2007
Pintura Wari Zarate.
VIERNES 5

RAÚL SULCA (Poesía) Nro. 677

FAUSTO LITURI (Poesía)

SAMUEL BUSTAMANTE (Poesía)

VIERNES 12

JORGE SOLÌS (Poesía) Nro. 678

ALEJANDRA GUARDIA (Poesía)

JORGE SANTIAGO FLORES (Narrativa)


VIERNES 19

CATALINA BUSTAMANTE (Poesía) Nro. 679

RAÙL GÀLVEZ CUÈLLAR (Narrativa)

GENARO LEDESMA (Poesía)


VIERNES 26

PANORÁMICA Y PERSPECTIVA Nro. 680

VI ENCUENTRO NACIONAL DE ESCRITORES

"MANUEL JESÚS BAQUERIZO
"

( 21 al 24 de nov. 2007 en Lima)

Participan: - Miembros de la Comisión Organizadora

- CDN y CDP.-Base Lima del

GREMIO DE ESCRITORES DEL PERÚ

AUDITORIO "MARIO FLORIÁN" DEL CENTRO DOLORIER EDITORES

Jr. Rufino Torrico Nro. 885 Lima – Perú

HORA: De 7 a 9 p.m.

INGRESO LIBRE

viernesliterarios@hotmail.com

SÓLO LA CULTURA SALVARÁ AL HOMBRE

MARCEL MARCEAU ¡PRESENTE!

EL PERFIL LATINOAMERICANO , programa internacional dirigido por Violeta Belesbía desde Alemania

YA VIENE EL VI ENCUENTRO NACIONAL DE ESCRITORES "MANUEL JESÚS BAQUERIZO"

Informes e inscripciones: ovienemjbaquerizo@hotmail.com










octubre 10, 2007

A TODAS LAS ARTES/ RECITAL LITERARIO MUSICAL/ COLEGIO DE ARQUITECTOS

"A TODAS LAS ARTES"
RECITAL LITERARIO MUSICAL Nº 14



El Consejo Regional Lima invita a todos los Miembros de la Orden al Recital Literario Musical Nº 14 - A Todas las Artes que se realizará el día jueves 11 de Octubre 2007, a partir de las 6:30 p.m. en el Auditorio de nuestra Sede Institucional, de acuerdo al siguiente
PROGRAMA:



LOS ESPERAMOS PARA COMPARTIR MOMENTOS DE GRATO ESPARCIMIENTO.

Arq. Enrique Alegre Salazar
Decano Regional Lima


Colegios de Arquitectos del Perú - Regional Lima
Av. San Felipe 999 - Jesús María - Lima 11 - PERÚ

Teléfonos: 265-4097 265-4098 265-6288 265-6266

octubre 01, 2007

OCTUBRE EN EL YACANA: ÒSCAR ARAGÒN Y HOMENAJE A LA REVISTA DE POESÌA "LA TORTUGA ECUESTRE"



POESÍA EN EL YACANA
Jr. de la Unión 892 (segundo piso) Centro de Lima

viernes 5 de octubre

7:30 pm
LECTURA DE POEMAS

ÓSCAR ARAGÓN



Poeta Òscar Aragòn en EL Yacana.
MUSICA
LARIMEL

viernes 12 de octubre

7:30 pm
LECTURA DE POEMAS

AGUSTIN HAYA DE LA TORRE
MANUEL LIENDO
DIEGO SÁNCHEZ

viernes 19 de octubre

7:30 pm
LECTURA DE POEMAS
JORGE CID (Chile)

8:OO PM
HOMENAJE A LA REVISTA DE POESÍA

La Tortuga Ecuestre

LA TORTUGA ECUESTRE & A SU DIRECTOR
EL POETA GUSTAVO ARMIJOS

Gustavo Armijos, director de la Revista La Tortuga Ecuestre.

ENTRADA LIBRE