DOS POEMAS DE FERNANDO ARTIEDA
DON FERNANDO
Conocí a Fernando Artieda como maestro y como poeta. Nos hemos visto varias veces, tanto en Lima como en Guayaquil. Conversamos mucho la última vez que vino a Lima como secretario del ex presidente Jaime Abdalá Bucaram. Recuerdo ya no quería saber casi nada de su libro “Safa cucaracha”, libro que yo había leído y que hasta ahora me gusta mucho. Pero él se encontraba disconforme con que solo lo relacionaran con ese libro. Así era de perfeccionista el poeta Fernando Artieda, un montubio de mucho coraje. Era valiente para enfrentar sus asuntos personales que le deparo la vida, la poesía y la política. Desde que él me brindó su amistad siempre nos hemos llamado por teléfono, aún en los momentos más difíciles. He sentido mucha pena por su viaje (al más allá), estoy seguro que volveremos a conversar de poesía en algún otro lugar.
Armando Arteaga SAFA CUCARACHA
Piara de miedos atados
por la manga
llegan al sol
sin clave
a mi re
sin su bemol.
Sinceramente resentido.
Hoy me vine a pecado desde casa.
A punta de Cortázar
dulcementeme
convidé un arroz.
Antes hube de anotar
mis pánicos
en la uña matriarcal
de mis tambores
en el badajo paterno
de mis címbalos.
TIENE LOS OJOS DE MI PUEBLO
Yo soñé con tus ojos color de lluvia
esperando llegadas como un espejo
con tus manos delgadas lavando espumas
y la pupila triste de mi silencio.
Un colmenar de fuego era tu risa
donde sembrar la sombra de tu ternura
para que allí florezca toda la brisa
que haga bandera el poema de tu hermosura.
Y en esa aventura criolla que fue tenerte
se quemaron pestañas y mi pasado.
Todas las cosas tristes, hasta la muerte,
se rompieron al verse en tus ojos claros.
Te quiero porque tus besos son más que míos
son de ellos, del mar, de todos, son de mi gente.
Te quiero porque al mirarme en tus ojos lindos
me está mirando mi pueblo constantemente.
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15 de abril del 2010
Falleció Fernando Artieda
FOTO: MIGUEL CASTRO / El Telégrafo
El poeta y escritor guayaquileño, Fernando Artieda, falleció hoy.
El periodista y poeta guayaquileño padecía de una enfermedad degenerativa. Falleció esta mañana en la Clínica Guayaquil.
Guayaquil, Ecuador
El poeta guayaquileño, Fernando Artieda Miranda, quien padecía esclerosis lateral amiotrófica, una enfermedad degenerativa, desde hace dos años, falleció esta mañana en la Clínica Guayaquil.
Artieda (64), escritor de libros como "Safa cucaracha" estudió Literatura y Derecho. Ejerció el periodismo por más de cuatro décadas en los diarios La Razón, Expreso, Meridiano y Hoy, así como en la revista Vistazo, y en los canales televisivos Ecuavisa y RTS.
También se desempeñó como docente en la Facultad de Comunicación Social (Facso) de la Universidad Estatal.
Meses atrás, cuando se publicó el poemario "El alcahuete de Onán", el escritor elucubraba que quizás aquel sería su último libro, y mucho de aquella suposición era una referencia tácita a la esclerosis que lo aquejaba.
En junio pasado, Artieda Miranda presentó "Seco y Volteado", una antología que recoge toda su obra poética.
El Gobierno Nacional, a través de la Secretaría Nacional de Comunicación, lamentó el fallecimiento del periodista y escritor.
Sus restos serán velados desde esta tarde en la Sala Exclusiva 2 de la Junta de Beneficencia. El entierro será mañana en el cementerio Jardines de la Esperanza.
FERNANDO ARTIEDA HABLA DE JULIO JARAMILLO
Fernando Artieda era un atento observador de lo popular y lo vernacular, asunto que elevo a nivel académico y clásico. Aquí hablanDo del Jota Jota.
JULIO JARAMILLO CANTANDO EL PASILLO
"GUAYAQUIL DE MIS AMORES"
"GUAYAQUIL DE MIS AMORES"
Recordado pasillo que Lauro Dávila escribió para Guayaquil, y que el gran Nicario Safadi le puso música. Junto a otros compositores, como Solís Moran, Silva Pareja, y Rubina Infante, hicieron avanzar en belleza el pasillo costeño.
GUAYAQUIL DE MIS AMORES
Tu eres perla que surgiste
del más grande e ignoto mar
y si al son de su arrullar
en jardín te convertiste
soberano en sus empeños
nuestro Dios formo un pensil
con tus bellas Guayaquil
Guayaquil de mis ensueños...
Si a tus rubias y morenas
que enloquecen de pasión
les palpita un corazón
que mitiga negras penas
con sus ojos verdes mares
o del negro anochecer
siempre imponen su querer
Guayaquil de mis cantares...
Porque tienen las princesas
que fascinan al mirar
y que embriagan al besar
con sus labios de cerezas
te reclamo las dulzuras
con que anhelo yo vivir
para nunca más sufrir
Guayaquil de mis ternuras...
Y al mirar sus verdes ojos
donde mi alma anhela estar
prisionera cual el mar
o al hundirme ya de hinojos
en las noches con fulgores
que sus ojos negros son
te dirá mi corazón
Guayaquil de mis amores...