noviembre 24, 2011

ME LO REGALÓ VÍCTOR HUMAREDA / Bernardo Rafael Álvarez


Pintor Víctor Humareda Gallegos
*

ME LO REGALÓ VÍCTOR HUMAREDA (Historia de un apunte)

Por Bernardo Rafael Álvarez

Con su sonrisa irremediable e inconfundible y probablemente imaginando a las mujeres que pasaban ante su mirada como a las sabinas, caletitas todas, y a los varones como a vulgares arlequines, se encontraba allí parado junto a la puerta del Bon Buffet. Y ese día, 14 de noviembre de 1979, en su cuarto del Hotel Lima, a las ocho y media de la noche -después de haberme invitado una “sopa de casa” en la pensión a la que él solía acudir, en el primer piso, al fondo, del edificio cercano en que por algunos meses vivieron Manuel Morales y Juan Ramírez Ruiz-, aquel pintor nacido en Lampa hizo este apunte de mi entonces juvenil rostro, empleando un carboncillo, virgen aún, que le habían traído desde París. Mientras disfrutábamos del cálido alimento, me comentó, mostrándome una tarjeta de invitación, que un artista plástico nacido en Trujillo le había pedido con mucha insistencia que fuera a la inauguración de una muestra suya que al día siguiente iba a realizarse en Miraflores. Por qué habrá sido tan insistente, me preguntó. Es fácil entenderlo, le contesté: será un honor para él que tú estés presente en esa reunión. “¡Ah, carajo, entonces no voy!”, exclamó y, medio fastidiado, metió la esquela en el bolsillo de su saco. Terminamos la sopa y nos salimos. “¿Quieres conocer mi cuarto?”, me preguntó pudiendo, evidentemente, adivinar la respuesta. Llamó un taxi y nos enrumbamos hacia la Victoria. Esta no fue la primera y tampoco la última vez que lo vi; a veces nos cruzábamos y en otras ocasiones íbamos juntos por La Colmena directo al Wony: desgarbado él, con el saco un tanto lustroso por el uso prolongado, y yo, naturalmente –como escribió Verástegui en un bello poema, respecto de Arteaga- (1), feliz de andar con Humareda. Un día, a eso de las siete de la noche, me topé con él en la avenida Venezuela, en la esquina que forma con el jirón Aguarico; verlo en el distrito en que yo vivía me pareció, como dicen los jóvenes, alucinante. Lo saludé y me contó que esperaba un carro para irse al Callao. Aquella tarde había visitado a su médico y este le dijo que ya no se preocupara, que su mal ya había sido superado; Humareda entendió, por ello, que ya estaba en condiciones para “volver a las andadas”. El carro que esperaba en Breña lo llevaría, pues, hacia algún lugar del Primer Puerto en que pensaba encontrarse con una mujer, de aquellas de “la vida alegre” a las que con cierta frecuencia acostumbraba buscar. La infección venérea que había sufrido hacía poco estaba completamente curada. Pero, muy a su pesar y por culpa del encuentro conmigo, esa noche no vería a la fémina deseada. Ingresamos en un restaurante y alrededor de unas tazas de café nos pusimos a conversar largo y tendido. Me habló de Toulouse Lautrec y del Maulina Rouge y yo le platiqué de Kafka, de Ionesco y de Becket; cuando escuchó este nombre y la pobre descripción que hice del escritor irlandés y de su obra, me pidió que lo repitiera y que le dictase letra por letra. Como en un acto de magia hizo saltar insólitamente, desde el bolsillo de su saco, una libretita de apuntes en la que procedió a hacer la anotación correspondiente. Hablamos también sobre algo de música; descubrí que no le gustaba mucho el folclor peruano y, me confesó, de Puno menos, pero le atraían de modo especial las melodías del Conjunto Ancashino Atusaría, revelación esta que, cómo no, me dio mucha alegría porque a mí también me gustaba y sigue gustándome el Conjunto Ancashino Atusaría. Pero el día que me invitó a conocer su casi desordenado cuarto, creo que de unos tres metros de ancho por cinco de largo, hablamos solo de pintura. Allí, donde era su dormitorio y taller (atelier le dicen los especialistas), me mostró emocionado, entre otros, un cuadro en que aparecían dos caballos peleando; me di cuenta que esperaba que lo alabara, que dijera, tal vez, qué buen cuadro, excelente. Pero, enfático (porque lo que me gusta, me gusta y lo digo sin ambages, y si no me gusta igualmente lo manifiesto sin dubitación) y también emocionado, le dije que el que realmente me parecía un cuadro hermoso era aquel en que se veía a un solo caballo, pataleando, tratando de no hundirse en las aguas del mar, procurando salvarse de morir ahogado; es un cuadro dramático, le comenté: transmite notablemente la desesperación del animal. El pintor se regocijó. Fue tras esto -claro que después de haberme contado sus gozos y sufrimientos experimentados con una amante prostituta- que sacó una silla, creo que la única que tenía, la colocó junto a la puerta y me ordenó, “siéntate, voy a dibujarte”. La noche anterior prácticamente no había dormido. La mujer que durante esos días lo visitaba a cambio de dinero, mirándose frente a un pequeño espejo se acicalaba mientras esperaba la llegada de un automóvil. Aproximadamente a las once sonó una bocina. Era él. La mujer corrió, dejando en la habitación un aroma de perfume barato. Víctor, silencioso, se quedó con el alma destrozada pero resignado; en el pecho sentía una opresión incontrolable, pero trataba de dominarse; miraba hacia la calle, elevaba los ojos al techo, ojeaba sus cuadros y pinceles. Era un dolor sin nombre. Luego se sentó a esperar. El silencio de las cuatro de la madrugada se interrumpió con el sonido de un motor que se detuvo en el mismo sitio en que antes había vibrado el claxon. “¡Qué alegría infinita, Bernardo, qué alegría!”, gritó regocijado. Enseguida cogió una hoja de papel y un lápiz que, -no es mentira- me dijo, había sido traído por un amigo desde Paris y en ese momento iba a usarlo por primera vez. Con ligereza y seguridad hizo los trazos correspondientes. Cuando me mostró el apunte terminado, lo abracé con emoción y le dije “gracias, Víctor; antier fue mi cumpleaños y hoy he recibido un tesoro como regalo”. Maltratado por la pátina del tiempo pero aún bello e incomparable, con ese color sepia de la nostalgia, este retrato, dibujo, apunte o como queramos llamarlo, en que aparezco con casi innecesarios anteojos, con nariz creo que más corta y peinado con raya al costado, sobrevive y persiste ante mis ojos. Y, créanme, a despecho de muchas circunstancias desventuradas, me inspira sentimientos nobles. Víctor Humareda me lo regaló, y yo, simplemente, me siento orgulloso y feliz.

(1) Revista Eros, donde Enrique Verástegui se refiere en el poema Composición IV a un encuentro entre Armando Arteaga y Víctor Humareda.

Ver:



Dos pinturas de Víctor Humareda:


Quinta Heeren

Tango

noviembre 23, 2011

Tendencias narrativas de la minificción peruana / Rony Vásquez Guevara

Tendencias narrativas de la minificción peruana. A propósito de sus orígenes, su panorama actual y su proceso evolutivo en la literatura peruana.


Por Rony Vásquez Guevara

Texto publicado en Plesiosaurio.

Primera revista de ficción breve peruana.

Nº 3. (2010)

Ponencia leída en el

VI Congreso Internacional de Minificción

(Bogotá, 2010)


Abraham Valdelomar

0.- Introducción.-

La minificción se constituye como un nuevo género literario en Latinoamérica. En Perú diversos escritores desde los primeros años del siglo pasado ya mostraban un acercamiento a esta modalidad textual. Curiosamente la gran parte de los textos brevísimos de estos autores fueron publicados póstumamente. No obstante, en la elaboración del presente trabajo se ha pretendido encontrar el texto fundacional de la minificción peruana. Con la misma finalidad hemos desarrollado un minucioso y detallado panorama de la ficción breve en el Perú, esperando haber colmado un pequeño espacio de aquel abismo vacío en que se encuentra el estudio de los textos breves peruanos. Finalmente, desarrollamos una periodización de esta modalidad textual con el propósito de detectar las características más sobresalientes en el proceso de evolución de la minificción. Debido al breve espacio proporcionado para el desarrollo de la presente investigación no hemos dedicado a expresar lo más relevante e importante en el estudio de la minificción peruana.

I.- Orígenes de la minificción en el Perú

Para poder rastrear los primeros pasos de la minificción en el ámbito literario peruano resulta indispensable empezar señalando a la revista ilustrada Variedades (1) fundado por el fotógrafo portugués Manuel Moral y Vega y dirigido desde el principio por Clemente Palma, que desde su primer número publicado el 07 de marzo de 1908, ya mostraba un acercamiento a estas modalidades textuales de carácter breve. Desde su primera portada ya se logra percibir este acercamiento, pues la imagen posee una minúscula leyenda que puede concebirse como un texto brevísimo(2). No obstante, si en posteriores ediciones suprimimos la imagen y dejamos el contenido narrativo, estos microtextos podrían ser considerados como minificciones:

En la sastrería (3)

-Vamos á ver, maestro, si con esta tela me hace usted un terno de verano, á la brevedad posible.
- ¿A qué medida?
- Hombre, hágalo á una medida que caiga bien para cuerpos demócratas, liberales, bloquistas y leguiístas.
Como se puede apreciar, estos textos gozan de una fuerte carga humorística de tendencia política, pues recordemos que por la década de 1910 en Perú existían diversos grupos políticos: los demócratas, liberales, leguiístas, entre otros. De igual manera, en la sección denominada “Chirigotas”, de carácter eminentemente caricaturesco, se aprecia una pintura que tiene como leyenda un texto brevísimo, el cual en relación con la gráfica puede ser considerado como un microtexto, cuya literariedad(4) es perceptible:

Jinete experto (5)

- La jornada es difícil y el penco está ya medio sucedido con los espolazos del jinete anterior. Mucho cuidado con que se empaque y se abra á los respingos.
- No tenga cuidado, buen hombre, que con mano firme y estribos cortos no hay respingos que valgan.

La característica más resaltante de estas brevedades (de la portada y de “Chirigotas”), que a nuestro criterio pueden concebirse como minificciones, radica en su brevedad extrema a través del uso del diálogo entre los personajes que se encuentran tácitos en el curso de la historia. En conclusión, el ácido humor político se percibe desde las primeras ediciones de esta revista semanal, ya sea en su portada o en su “Chirigotas”. Esto debido a la tendencia y línea editorial de carácter opositor frente al Gobierno de turno.

No obstante, el plano periodístico no se configura como el único espacio en donde se divulgó estas modalidades textuales de carácter esencialmente breves, pues nuestros los reconocidos escritores peruanos de la época experimentaron también con formas breves de escritura. Con la finalidad de no expandir el marco de análisis de la presente investigación sólo nos referiremos a los textos breves de Ricardo Palma, Abraham Valdelomar, Manuel González Prada y César Vallejo. La crítica literaria peruana y extranjera ha reconocido favorablemente para nuestras letras el aporte que cada uno de los mencionados escritores heredó a las futuras generaciones; sin embargo, se ha soslayado u olvidado el estudio de sus libros constituidos por textos breves. Una característica peculiar de sus libros compuestos por microtextos en todos estos recordados escritores peruanos radica en la publicación de los mismos. Para una mejor apreciación, creemos conveniente realizar un brevísimo análisis de cada uno de ellos.

Nuestro recordado Tradicionalista Don Ricardo Palma, desde nuestra perspectiva, también experimentó con las formas breves de narrativa en su libro póstumo Tradiciones en salsa verde (TSV) cuya aparición oficialmente pertenece a 1973, a cargo de Francisco Carrillo y Carlos Garayar(6). Estas nuevas Tradiciones tienen un límite aproximado de 200 a 600 palabras y se caracterizan por el elevado tono sugerente de las anécdotas narradas. Consideramos necesario resaltar que la publicación oficial de TSV es una edición muy posterior al año de su creación, pues en 1904 en una carta que el “Bibliotecario mendigo” remite a su amigo Carlos Basadre, le envía este conjunto de “hojitas” a manera de regalo de cumpleaños(7). Existen algunas versiones que señalan que TSV fueron manuscritas en 1901 y transcritas en 1904(8), pero es conocido que clandestinamente ya circulaban estas tradiciones en la sociedad antes de su publicación. Al referirse sobre las TSV el conocido miniaturista Enrique Anderson Imbert comenta que “La mayoría de ellas están construidas sobre meros juegos de palabrotas o con viles anécdotas. Sus héroes son de monstruosa anatomía o sólo existen de la cintura para abajo.(9)” De todo lo anteriormente señalado, consideramos que el proceso creativo de Don Ricardo Palma -probablemente desarrollado en 1901 y manifestado en 1904- en TSV caracterizada además por su notable brevedad encontramos el momento fundacional de la minificción peruana, muy a pesar de su posterior publicación. En ese orden de ideas, el texto fundacional correspondería al primero de TSV: “La pinga del Libertador”.

El Director de la recordada revista Colónida, Abraham Valdelomar, no escapó al ejercicio de las brevedades. Esto se percibe en la colección de textos brevísimos titulados Neuronas. Él anunció de la publicación de este libro se presentó en la contracarátula de El Caballero Carmelo en 1918; sin embargo, todos los textos que se conocen son póstumos. Debemos rescatar que muchas de estas brevedades habían sido publicadas ya en la revista Studium Nº 2 publicada en 1920, y que han sido rescatadas en sus Obras Completas edición a cargo de Ricardo Silva Santisteban y publicado por PETROPERÚ en el 2001(10). Desde nuestro punto de vista, estos textos pueden considerarse minificciones por la brevedad, la concisión y la literariedad que demuestran:

VI

“Respiramos muerte. Somos vivos hechos con muertos.”

Se percibe, entonces, la economía de palabras y el empleo de la dualidad vida-muerte, que demuestra su carácter elíptico. De esta manera, la reflexión en torno a la materia que constituye la vida del hombre se conecta en un círculo vicioso con la muerte. La concisión, entonces, se presenta como uno de los rasgos más característicos de la minificción y Valdelomar alcanza este recurso a través del empleo mínimo de palabras logrando un amplio campo semántico(11). Sin embargo, se puede afirmar que Valdelomar concibió antes de 1918 los textos que integrarían posteriormente Neuronas, pero su temprano fallecimiento en 1919 impidió el conocimiento de sus textos en un conjunto textual (libro).

El recordado maestro y anarquista Manuel González Prada dedicó un espacio minúsculo pero importante a su labor miniaturista. Esta tendencia a lo breve lo encontramos en la sección denominada “Memoranda” de su libro El tonel de Diógenes publicado en 1945 . Recordemos además que solo Pájinas libres y Horas de lucha fueron publicadas en vida del autor, pues sus demás libros no menos importantes han sido de publicación póstuma. En ese sentido, Alfredo González Prada encargó a Luis Alberto Sánchez la publicación de estos textos, entre ellos El tonel de Diógenes. Del proceso creativo de este libro, y en especial de “Memoranda” no se tienen fecha, pero resulta probable que estos hayan sido escritos en los primera década de 1900. Una muestra de “Memoranda” es el siguiente texto:

41
No somos criminales sino víctimas de la Naturaleza, y la muerte no se presenta como un castigo, sino como la retirada gloriosa en el combate de la vida. No tenemos por qué humillar la frente en nuestro viaje por la Tierra ni por qué temblar al hundirnos en el desconocido abismo de la muerte.

En “41” se percibe la economía de palabras que exige todo texto minificcional; sin embargo, la narratividad se muestra como una característica correspondiente a la época en la que vivió el autor. Estas son características estructurales de los 261 textos brevísimos que componen este libro(13).

Finalmente, nuestro más loable poeta peruano César Vallejo trabaja la creación de textos breves en “Contra el secreto profesional”. Sobre este libro se conoce que su producción oscila entre 1923 y 1929; sin embargo, sus textos estuvieron durmiendo al no encontrar una editorial que los publicara. Esto terminó en 1973, año en que la Editorial Mosca Azul publica El arte y la Revolución, libro en el cual encontramos “Contra el secreto profesional” con un prólogo de su viuda Georgette. Nuevamente, se percibe entonces que el proceso de creación de nuestros escritores peruanos se percibe retrasado en cuanto a su publicación. Sin embargo, en los textos breves de Vallejo se percibe un mayor acercamiento a las características narrativas de las minificciones actuales:

Sin título
Sin mostrar el menor signo de temor, ni siquiera disfrazarse, el asesino siguió viviendo normalmente, a la vista general. Lejos de esconderse, como lo habría hecho cualquier matador ramplón, anduvo por todas partes. La policía no puedo encontrarle, precisamente porque él no se escondió. Pascal ha tenido razón, cuando ha dicho: “Tú no me buscarás, si no me hubieras ya encontrado”.

A tal libre el individuo es libre e independiente.

Este texto, si seguimos la terminología que alguna vez utilizó nuestra recordada maestra Dolores Koch, se concibe como un microrrelato pues en su desenlace la voz narrativa termina con un pensamiento llamado por el autor. La brevedad, la elipsis y otros recursos narrativos también están presentes aunque en una versión aún rudimentaria en comparación a las minificciones producidas a partir del nuevo milenio.

Llegado a este punto creemos conveniente realizar unas previas conclusiones: a) reafirmamos que la producción de la minificción se encuentra ligado estrechamente al criterio editorial y cuyos orígenes encontramos en la revista Variedades; b) la producción minificcional peruana en sus orígenes tiene un rasgo peculiar: los libros han sido creados aproximadamente durante los años 1900 y 1930, pero sus publicaciones son posteriores a 1945 e incluso son configuradas como obras póstumas de cada escritor.


Julio Ramón Ribeyro

II.- Breve panorama de la minificción en el Perú.-

El tratamiento de la minificción en el Perú resulta muy difícil ya que su producción ha sido escasa en sus orígenes, como ya lo hemos señalado en líneas anteriores. Sin embargo, esta carencia ha ido cambiando en los últimos años gracias al apoyo editorial existente en la actualidad. Por ello Harry Belevan, en uno de los primeros artículos sobre el cuento breve en el Perú, dice lo siguiente: “Que sea apenas Loayza o unos pocos más, lo cierto es que la escasez del minicuento es una realidad de nuestra narrativa en el Perú. Esta modalidad de escribir y narra constituye , hasta más que una anotación marginal, apenas una observación de pie de página dentro de nuestra corriente literaria, teniendo así, como inexorable corolario, la casi nula atención que ha merecido de la crítica especializada como una modalidad expresiva, singular y autónoma, dentro de la narrativa nacional.(14)”

Esta última anotación ha llegado a nuestras manos gracias a la primera antología peruana de esta forma de narración: Breves. Brevísimos. Antología de la minificción peruana (2006) cuya selección pertenece a Giovanna Minardi. En este trabajo compilatorio se presenta curiosamente textos de estructura breve que enmarcan el período literario desde Inca Garcilaso de la Vega hasta los contemporáneos Carlos Eduardo Zavaleta, Adolfo Vienrich, Fernando Iwasaki, Carlos Meneses, entre otros más.

A esta antología hay que sumar los libros que han publicado diversos autores con marcada y consciente alusión al cuento breve. Así tenemos a Tradiciones en salsa verde (1973) de Ricardo Palma, Contra el secreto profesional (1973) de César Vallejo, El avaro (1955) de Luis Loayza, Un cuarto de conversación (1966) de Manuel Mejía Valera, Isla de otoño (1966) de Manuel Velázquez Rojas, Prosas apátridas (1975) de Julio Ramón Ribeyro, Monólogo desde las tinieblas (1986) de Antonio Gálvez Ronceros, algunas narraciones de Cuentos del relojero abominable (1974) de José Adolph, Cuentos sociales de ciencia-ficción (1976) de Juan Rivera Saavedra, Los pasos. Cuentos. Siete. (s/f) de Julio Garrido Malaver, Alforja de ciego (1979) de Jorge Díaz Herrera, Lección de fe y otras ficciones de Isaac Goldemberg, Cuentos de cortometraje (2002) de Armando Arteaga, Ajuar funerario (2004) y Helarte de Amor (2006) de Fernando Iwasaki, Fábulas y antifábulas (2004) de César Silva Santisteban, Enciclopedia mínima (2004) de Ricardo Sumalavia, El horno del reverbero (2007), Ars Brevis (2008), Haruhiko & Ginebra (2009) de José Donayre, Cuentos de bolsillo (2007) de Harry Belevan, Cuentos Brevísimos (2007) de Carlos Eduardo Zavaleta, Un café en la Luna (2008) de Carlos Meneses, De cómo quedé estando aquí (2008) de Hernán Garrido Lecca y Microacertijos literarios (2009) de Ricardo Calderón Inca(15). Y, a esta larga cuenta de libros de ficción breve hay que sumar la segunda antología de ficción breve –y la última hasta el momento- en la cual se menciona en su mayoría a peruanos. Nos referimos a Colección minúscula. Cinco espacios para la ficción breve (2007) compilado por Ricardo Sumalavia. En esta compilación encontramos a dos autores que no fueron mencionados por Giovanna Minardi: Mónica Belevan y Enrique Prochazka.

Cierto es que en la actualidad el terreno de la literatura peruana respecto al microrrelato se presenta con interesante esperanza pues escritores como Julio Ortega, Arturo Corchera, Mario Guevara Paredes, Carlos Herrera, Gonzalo del Rosario, Tito Roque Aroni, Daniel Salvo, Fernando Carrasco, Carlos Rengifo, Jack Flores, Manuel Velásquez, Lucía Fox, Tanya Tïnjälä, Silvana Reyes Vasallo, Maritza Iriarte, Elsa Vértiz, Lucho Zúñiga, Jorge Ramos Cabezas, Marco Rivera, entre otros más, ya han iniciado esta producción literaria tan peculiar tanto en el interior de libros, como en antologías y revistas de literatura.

No obstante, es menester resaltar la presencia de la generación del 50’ y sus escritores: Carlos Eduardo Zavaleta, Luis Loayza, Eleodoro Vargas Vicuña, Julio Ramón Ribeyro, Manuel Velázquez Rojas, Luis León Herrera, Luis Alberto Ratto, entre otros más quienes han sido la semilla del cuento breve nuestra literatura(17).

Isaac Goldemberg

En el aspecto editorial, modestamente Plesiosaurio. Primera revista de ficción breve peruana se consolida como la originaria apuesta en torno al microrrelato; en sus dos números existentes (noviembre de 2008 y setiembre de 2009) ha demostrado su convicción y apuesta por este proyecto novedosa modalidad textual en el Perú. Continuando con esta aventura literaria, la reciente Fix100-Revista de ficción breve hispanoamericana se ha unido a la promoción de la minificción en las letras hispanoamericanas. Sin embargo, es necesario señalar que algunas revistas literarias como Bocanada(18), Tinta Expresa(19), El grito de Maldoror(20), Discursiva(21), Ónice (22) y Bosque de latidos(23), han publicado como apéndices algunos textos de formatos breves.

III.- Recursos narrativos en la minificción peruana.-

Después de haber realizado una rápida mirada al desarrollo del proceso minificcional en la literatura peruana, creemos conveniente destacar las características y técnicasnarrativas más empleadas en la creación de minificciones. Para esta empresa resulta de mayor eficacia elaborar una delimitación de nuestra narrativa breve en tres momentos:

a) periodo de iniciación o experimentación, correspondiente al periodo de tiempo que oscila aproximadamente entre 1900 y 1949, donde encontramos a escritores como Ricardo Palma, Manuel González Prada, Abraham Valdelomar, César Vallejo y los textos breves de la revista Variedades. El rasgo particular de este período es que las obras de estos autores han sido conocidas póstumamente de manera oficial; sin embargo, existen documentos que demuestran que su elaboración se realizó durante las primeras cinco décadas del siglo pasado.

b) periodo de arquitectura mínima o de los primeras estructuras, que se ubica en el espacio que comprenden los años 1950 y 1999, donde se rescata la labor realizada por los narradores peruanos de la Generación del Cincuenta al producir la modernización de la narrativa peruana a través del empleo de las técnicas narrativas de vanguardismo que se practicaron a partir de la década del 20’ en Europa y Estados Unidos. No obstante, escritores que se ubican cronológicamente posteriores a la mencionada generación también realizaron aportes indiscutibles a la producción de minificciones. Entre los escritores más destacados, en función de su producción minimalista, tenemos a Carlos Eduardo Zavaleta, Carlos Meneses, Eleodoro Vargas Vicuña, Tulio Carrasco, Manuel Velázquez Rojas, Julio Ramón Ribeyro, Luis León Herrera, Luis Alberto Ratto, entre otros. La característica singular de este período radica en el tratamiento de temas sociales complejos a través del empleo de la economía de palabras, esto es, la capacidad de presentar los conflictos sociales en un espacio breve o mínimo de palabras.

c) período de fortalecimiento o de vigorización, que comprende los años posteriores a la apertura del nuevo milenio, y cuyo trabajo editorial ha sido de suma importancia para el desarrollo de la minificción en las letras peruanas. Así encontramos a casas editoriales como Mundo Ajeno Editores, Muro de Carne librería taller y Editora Mesa Redonda que han publicado diversos libros de minificción, esfuerzo y aventura que anteriormente no había sido desarrollado por otros grupos editoriales. En este periodo debemos necesariamente reconocer a Ricardo Sumalavia y Fernando Iwasaki, por ser los más fecundos creadores de textos brevísimos, y aplaudir la genialidad narrativa de José Donayre quien lleva publicado tres libros de narrativa muy breve. Esto no significa que desconozcamos y reconozcamos la producción literaria de características minimalistas de otros jóvenes escritores.

En estos tres periodos de la minificción peruana, la brevedad por antonomasia se constituye también como el elemento esencial de esta modalidad textual narrativa. Sin embargo, la concepción de “brevedad” debe ser pensada en razón de la cultura y al momento histórico en la que se desarrolla, pues al hacer referencia a la extensión o quantum de palabras no se lograría establecer límites rigurosos, exactos o precisos que determinen qué texto es o no considerado como minificción(24). En ese sentido, los textos narrativos pertenecientes al periodo de experimentación pueden ser concebidos como breves en razón del empleo mínimo de palabras, que para los lectores de aquella época eran considerados como brevedad extrema.

Posteriormente, durante el periodo de las primeras estructuras se percibe un estrecho acercamiento a la definición actual de “brevedad” en razón de textos narrativos, pues la mayoría de escritores logran no excederse estrictamente bordear de la página impresa o de una cuartilla. De esta manera, se cumple con el principio de unidad de impacto, en la cual no existe interrupción entre el texto y el lector durante el proceso de lectura.

Llegados al nuevo milenio y al denominado periodo de vigorización la brevedad se radicaliza transformándose en brevedad extrema. Este periodo se caracteriza por la brevedad vertiginosa de los textos narrativos, en donde un libro de minicuentos es la descripción de un universo mediante trazos breves y precisos(25).

Desde otra perspectiva, en la literatura latinoamericana es conocida la diferenciación entre minicuento y microrrelato que nuestra recordada maestra Dolores Koch propuso en su momento:

“¿Cómo podría diferenciarse el micro-relato del minicuento? En el minicuento los hechos narrados, más o menos realistas, llegan a una situación que se resuelve por medio de un acontecimiento o acción concreta. Por el contrario, el verdadero desenlace del micro-relato no se basa en una acción sino en una idea, un pensamiento. Esto es, el desenlace de un minicuento depende de algo que ocurre en el mundo narrativo, mientras que en el micro-relato el desenlace depende de algo que se le ocurre al autor. Esta distinción no es siempre fácil. Otra característica esencial del micro-relato es la fusión de géneros. Algunos elementos narrativos lo acercan al cuento convencional, pero el micro-relato se aleja de los parámetros del cuento y del minicuento porque participa de algunas de las características del ensayo y del poema en prosa.” (26)

De esta manera, las estructuras de las minificciones peruanas también responden a estos criterios y al periodo en el que se desarrollan. Así, en un primer momento los textos pertenecientes al período de iniciación deben ser concebidos como experimentos literarios, que ya suelen realizar la característica conocida como hibridación genérica. Durante este periodo la minificción no logra percibirse en términos de minicuento o microrrelato, pues su brevedad es el rasgo que lo ubica en este primer momento del panorama de la minificción en el Perú.

Por su parte, los textos pertenecientes al denominado periodo de las primeras estructuras en su mayoría se caracterizan por poseer la distribución tradicional de un cuento clásico, esto es, presentación, nudo y desenlace. Los textos predominantes escritos durante este periodo reflejan su intensa carga narrativa en un espacio mínimo y esencial de palabras, recurriendo para ello al empleo de personajes estereotipados(27), la reescritura o la parodia(28) y la intertextualidad intensa(29), entre otros recursos.

En los últimos años correspondientes al periodo de vigorización los textos breves que predominan en su mayoría cumplen cabalmente con la denominación de microrrelatos, pues existe una fuerte presencia de la hibridación genérica que logra alejarla de un género estricto, y se recurre agudamente al bagaje cultural del lector, denominado virtualidad narrativa (30) o pacto de lectura entre el texto y el lector. Durante este periodo sobresale la narrativa breve en la cual se sugiere el campo semiótico del texto a través del uso económico de palabras y de la explotación lúdica del doble sentido(31). Un papel muy importante ha jugado el avance tecnológico durante este periodo, pues internet se constituye como uno de los soportes más concurridos para la publicación de estos textos brevísimos.

IV.- Coda.-

La minificción peruana encuentra sus orígenes en Tradiciones en salsa verde de Don Ricardo Palma, publicada oficialmente en 1973 y escrita aproximadamente en 1904. La brevedad de los textos que la componen nos ha llevado a esta aventurada pero considerable conclusión. Sin embargo, no rechazamos la afirmación del maestro Edmundo Valadés al señalar a Ensayos y Poemas (1917) de Julio Torri como primer exponente de la minificción en la literatura latinoamericana. Pues, nuevamente señalamos, que los textos de los escritores pertenecientes al periodo de iniciación fueron publicados póstumamente en libros o revistas.

Por su parte, las tendencias narrativas de la minificción peruana han devenido en un proceso de evolución como ya hemos señalado anteriormente, pues básicamente la concepción de la “brevedad” se ha constituido como el rasgo esencial de esta modalidad textual. No obstante, debemos apuntar que las estructuras narrativas de las minificciones peruanas también han sido afectadas por esta evolución, y en las cuales se han demostrado diversas técnicas narrativas que consiguen la brevedad.

Finalmente, esperamos haber colmado las expectativas respecto a este trabajo de investigación, y terminamos señalando que resulta necesario e indispensable, en la posteridad, expandir las estructuras que integran este texto.

NOTAS

[1]Variedades. Revista semanal ilustrada se constituyó como sucesora de la Revista Prisma (fundada en 1905) pero diferenciada de ésta por su carácter más ágil, popular y ameno. Creemos conveniente resaltar que aparece en el primer número de Variedades el encabezado Año IV de la publicación, con la cual se reafirma como sucesora de la Revista Prisma. Asimismo no debe olvidarse que Variedades tuvo una edición a modo de prospecto publicada el 29 de febrero de 1908. En el panorama periodístico peruano Variedades se constituye como una de las revistas de mayor producción pues se logró editar hasta el Nº 1230, cuya fecha data del 30 de setiembre de 1931.

[2] La revista Variedades estaba integrada por diversas secciones que pueden agruparse de la siguiente manera: a) Caricaturas: “Chirigotas”, “La semana cómica”, “Gente de casa” y “La caricatura en el extranjero”; b) Cultural y político: “Teatro y espectáculos”, “Modas”, “Curiosidades y recortes”, “Comercio e industria”, “Información europea”, “Figuras y aspectos de la vida mundial”; c) de carácter local: “De provincias”, y “Recetas caseras”. En la sección denominada “Chirigotas” nosotros consideramos que se encuentra el origen de la minificción, pues desde su primera portada de 07 de marzo de 1908 nos presenta un texto brevísimo de cargada resonancia política y humorística:

Mascarada Política

-Dificulto que así disfrazados nos conozcan
-¡Quiá hombre, aquí todos nos conocemos!

[3] Portada de Variedades. Revista semanal ilustrada Año VIII, Nº 243. Lima, 26 de octubre de 1912.

[4] Según el Prof. DAVID LAGMANOVICH el término “literariedad” se entiende como “un producto de ciertas características estructurales y de ciertos rasgos que transmiten el significado, todo ello aceptado en virtud de condiciones estéticas que el lector reconoce como tales” y así determinar que la literatura es “un conjunto de textos, siempre que esos textos sean literarios, vale decir, que tengan o manifiesten la condición que hemos llamado literariedad.” En: El microrrelato. Teoría e historia. 1ra ed. Palencia, Editorial MENOSCUARTO, 2006. p. 21.

[5] “Chirigotas”. En: Variedades. Revista semanal ilustrada Año VIII, Nº 243. Lima, 26 de octubre de 1912. p. 1279.22

[6] PALMA, Ricardo. Tradiciones en salsa verde. Lima, Ediciones de la Biblioteca Universitaria, 1973. Prólogo de Francisco Carrillo y Carlos Garayar.

[7] Don Ricardo Palma a su amigo Carlos Basadre: “Sabe usted, mi querido Carlos, que estas hojitas no están destinadas para la publicidad y que son muy pocos, los que en la intimidad, de amigo a amigo, los conocen. Alguna vez me reveló usted el deseo de tener una copia de ella, y no sabiendo qué agasajo le sería grato hoy, día de su cumpleaños, le mando mis Tradiciones en salsa verde, confiando en que tendrá usted la discreción de no consentir que sean leídas por gente mojigata, que se escandaliza no con las acciones malas sino con las palabras crudas. La moral no reside en la epidermis.”

[8] RODRÍGUEZ CARUCCI, Alberto. “Tradiciones en salsa verde. Humor, desenfado, procacidad”. Presentación. En: Palma, Ricardo. Tradiciones en salsa verde. Caracas, Fundación Biblioteca Ayacucho, 2007. pp. 15 y ss.

[9] ANDERSON IMBERT, Enrique. Historia de la literatura hispanoamericana. La Habana, Instituto Cubano del Libro, 1972. p. 473.

[10] VALDELOMAR, Abraham. Obras Completas. Tomo IV. Edición a cargo de Ricardo Silva Santisteban. Lima, PETROPERÚ Ediciones, 2001. pp. 395-408.

[11] Valdelomar también alcanza la minificción en:

IV

Sacando a los analfabetos, las gentes del Perú se dividen en dos clases: una que siembra algodón y otra que escribe majadería. A estos últimos solemos llamar generalmente escritores.

[GONZÁLEZ PRADA, Manuel. El tonel de Diógenes. México, Tezontle, 1945. pp. 177 y s
[13] Otra muestra de minificción es la siguiente:

80

El Catolicismo: carne fungosa involucrada en el organismo social, hongo negro nacido en el estercolero del Imperio Romano.

[14] MINARDI, Giovanna. Breves, Brevísimos. Lima: Editorial Santo Oficio, 2006. p. 17.

[15] VÁSQUEZ GUEVARA, Rony. “Panorama esencial de la minificción en Hispanoamérica”. En: Plesiosaurio. Primera revista de ficción breve peruana. Año I, Nº 1: noviembre, 2008. pp. 14-26.

[16] Es necesario mencionar que existen más autores que se han comprometido fehacientemente con la producción de esta nueva modalidad textual. Si hemos obviado algunos nombres ha sido a consecuencia de no haber tenido contacto con su obra.

[17] VÁSQUEZ GUEVARA, Rony. “Diez minutos de teoría de la minificción: acerca de los orígenes de la minificción en el Perú”. En: Plesiosaurio. Primera revista de ficción breve peruana. Año II, Nº 2: setiembre, 2009. pp. 19-27.

[18] SIFUENTES ATABALES, Cindy. “Último” y “Silencio”. En: Bocanada. Revista Literaria. Año II, Nº 2. Lima. 2005.

[19] GARCÍA LANDAVERI, Giancarlo. “Miradas efímeras”; y, VÍRHUEZ VILLAFANE, Ricardo. “Cinco cuentos de guerra”. En: Tinta Expresa. Revista de Literatura. Año II, Nº 2. Lima. 2006.

[20] ELGUERA, Christian. “Orfeo en la oficina”, “El mito de Ofelia”; ENALM. “Bienvenido”; GUERRA, Jhonn. “Aureliano se quedará sólo”; y, VÁSQUEZ, Rony. “La pulga”, “Detenido Político”, “Iluminación”, “Pregunta vital”, “Memorias de La Muerte”. En: El grito de Maldoror. Bestiario de la fantasía creadora. Año II, Nº 2. Lima. 2007.

[21] ALFONSO, Óscar. “El matrimonio feliz”; y, VÁSQUEZ, Rony. “Newton primitivo”. En: Discursiva. Revista de Literatura y Humanidades. Año II, Nº 2. Lima. 2008.

[22] RAMOS CABEZAS, Jorge. “El zapatero” y “El mejor amigo del hombre”. En: Ónice. Revista de creación. Año IV, Nº 3. Lima. 2009.

[23] DORIA, Dani. “Encuentro”; HUALPA, Paul. “Las cosas que pasan”; Mendoza, Rafael. “Buenos amigos”; y, VÁSQUEZ GUEVARA, Rony. “P.N.P.” y “El mundo de los hombres sin cabeza”. En: Bosque de latidos. Revista literaria. Año II, Nº 3. Lima. 2008.

[24] Violeta Rojo señala que “aún en el concepto de brevedad, hay diferencias. Para Bustamante y Kremer, así como para Borges y Bioy puede llegar a las 3 páginas; Epple, Zavala, Brasca, González, Valadés y González Irabia no pasan de las 2; Fernández Ferrer se mantienen en 1.” ROJO, Violeta. “De las antologías de minicuento como instrumentos para la definición teórica”. En: Francisca Noguerol (Coord). Escritos disconformes. Nuevos modelos de lectura. Salamanca, Ediciones Universidad de Salamanca, 2002. pp. 131-132.

[25] SEQUERA, Armando José. “La narrativa del relámpago. (20 Microapuntes para una poética del Minicuento y 4 anotaciones históricas apresuradas).” En: Francisca Noguerol (Coord). Escritos disconformes. Nuevos modelos de lectura. Salamanca, Ediciones Universidad de Salamanca, 2002. pp. 78 y ss.

[26] KOCH, Dolores. “Diez recursos para lograr la brevedad en el micro-relato”. En: El Cuento en red. Nº 2. 2000. pp. 3- 4.

[27] ANDRÉS-SUÁREZ, Irene. “El microrrelato. Intento de caracterización teórica y deslinde con otras formas literarias afines”. En: Teoría e interpretación del cuento. Constanza, Meter Lang, 1995. pp. 89-90.

[28] LAGMANOVICH, David. “Hacia una teoría del microrrelato hispanoamericano.” En: Microrrelatos. Buenos Aires, Cuadernos del Norte y del Sur, 1997. pp. 53 y ss.

[29] ZAVALA, Lauro. El boom de la minificción y otros materiales didácticos. Calarcá, Editorial Cuadernos Negros, 2008. pp. 23 y ss.

[30] FERNÁNDEZ, José Luis. “Hacia la conformación de una matriz genérica para el microcuento hispanoamericano” En: Literatura y Lingüística. Nº 16. Santiago de Chile, Ediciones de la Universidad Católica Silva Henríquez, 2005. pp. 107-134.

[31] TOMASSINI, Graciela y Stella MARIS COLOMBO. “La minificción como clase textual transgenérica”. En: Revista Interamericana de Bibliografía. Nº 46: 1-4. Año 1996. pp. 49-66.

VER:

O

ARGUEDAS EN NOSOTROS: RIMANAKUY HACIA EL FUTURO

ARGUEDAS EN NOSOTROS:
RIMANAKUY HACIA EL FUTURO



Al cumplirse el 42 aniversario de su fallecimiento, Chirapaq Centro de Culturas Indígenas del Perú, el Programa de Maestría en Antropología Visual de la PUCP, y el Centro de Antropología Visual del Perú CAVP rinden homenaje al amauta José María Arguedas con el estreno del documental “Arguedas en Nosotros: Rimanakuy hacia el futuro” (27 min.). Previo al estreno se presentará el corto “Camina el Autor: Guamán Poma de Ayala” (10 min.).

Participan en los comentarios el poeta Armando Arteaga, la antropóloga Gisela Cánepa, el investigador Leo Casas, la cantante Sylvia Falcón, y el cineasta Wilton Martínez.

Hora:
Viernes, 2 de diciembre • 19:00 - 21:00

Lugar:
Centro Cultural de la PUCP - Sala 3 (Av. Camino Real 1075, San Isidro).

INGRESO LIBRE

Informes:Chirapaq Centro de Culturas Indígenas del Perú

Teléfono: 423-2757
 

I Encuentro de Integración Cultural Aucallama


I Encuentro de Integración Cultural Aucallama y La Asociación de Escritores y Poetas Ancashinos - Filial Lima / Porfirio Vásquez Aparico - Carlos Eduardo Zavaleta

*

La Municipalidad distrital de Aucallama de la Provincia de Huaral - Lima y La Asociación de Escritores y Poetas Ancashinos - Filial Lima, invitan a las celebraciones del I Encuentro de integración cultural Aucallama y La Asociación de Escritores y Poetas Ancashinos - Filial Lima - Porfirio Vásquez Aparicio - Carlos Eduardo Zavaleta, a celebrarse en la ciudad de Aucallama los días, 25, 26 y 27 de noviembre de 2011.

El alcalde, César Balcázar Labrín y presidente de AEPA-FL, Áureo Sotelo Huerta, agradecen su valiosa participación.


Aucallama

Ubicación: Aucallama, se encuentra ubicado en la margen izquierda del río Chancay a 13 Km de la ciudad de Huaral y a una altura de 45 msnm.

Se llega a la ciudad de Aucallama, a través de un vía de 4 Km. que parte del Km. 9 de la pista que viene de la variante a Huaral. Aucallama limita por el Norte: Con el Distrito de Chancay y el Distrito de Huaral; por el Este: Con el Distrito de Sumbilca y la Provincia de Canta, por el Sur: Con la Provincia de Canta y Provincia de Lima; y por el Oeste: Con el Océano Pacífico. Su creación data del 12 de Febrero de 1,821 con su capital el pueblo del mismo nombre. Finalmente por Ley N° 9313 del 29 de Noviembre de 1,940 reaparece Aucallama como Distrito.

Su Plaza de Armas, de tipo colonial tiene una bonita glorieta al centro y está rodeada de jardines. Tiene una histórica Iglesia reconstruida tres veces; pues fue construida en 1539, la primera en 1555, la segunda en 1652 y nuevamente en 1874.En su Iglesia se venera la imagen de la Virgen del Rosario, la más antigua de la Provincia y que fue regalada por el Rey Carlos I de España y V Emperador de Alemania, con todos sus ornamentos. Además cuenta con un moderno Palacio Municipal (1995), Comandancia, Posta Médica, que depende del Hospital de apoyo de Huaral.

Para su Transporte y Comunicación, utiliza para trasladarse a la ciudad de Huaral, microbuses y autos; y para ir a la capital los pobladores salen a la carretera Huaral - Variante Pasamayo o se dirigen a Huaral para tomar las líneas de ómnibus que van a Lima. La ciudad tiene acceso a la señal telefónica y a la televisión.




Programa:

Día: 25 de noviembre de 2011 (viernes)

Salida de Lima

Nombre de la empresa: Empresa de transportes turismo Huaral SA. Dirección Principal: JR. Jirón Julián Piñeyro #440 (Loreto) (cerca a la municipalidad del Rímac.

Concentración: Hora: 13.30 pm. (una y media de la tarde)

Responsables:

Delegación de Lima: Áureo Sotelo Huerta - teléfonos: casa: 3481575

Cel. 968281505

Delegación de huacho: Responsable: Filomeno Zubieta

Delegación de Chimbote: Responsable: Víctor Hugo Alvites


Viernes 25 de noviembre de 2011

4.00 pm. recepción de la diferentes delegaciones por el Alcalde, regidores y pueblo de Aucallama. 5.00 pm. instalación de las delegaciones en el alojamiento.

6.00 pm. Inauguración del encuentro por el alcalde de Aucallama.
(programa especial)

6.30 pm. Documental sobre el turismo en Aucallama.

7.30 pm. Presentación teatral por el Elenco Profesional de teatro de la Universidad Ricardo Palma. Dirige. Áureo Sotelo Huerta.

8.30 pm. Cena

9.30 pm. Fogata cultural, participan, poetas, declamadores, narradores y pueblo de Aucallama, con programa especial.


Sábado, 26 de noviembre de 2011

7.00 a 7.45 am. Desayuno

8.00 a 10.00 am. Concurso de declamación de décimas, en honor a Don Porfirio Vásquez Aparicio.

10.00 a 12.30 m. Ponencias, presentaciones de libros, exposición de pinturas a cargo del Grupo cultural palabras del alma.

12.30 a 14.30 h. Almuerzo.

14.30 a 18.30 h. Ponencias, lectura de poemas y presentaciones de libros.

18.30 a 19.30 h. cena.

20.00 a 21.00 h. Recital poético

23.00 h. Fogata cultural, participan, poetas, declamadores, narradores y pueblo de Aucallama, con programa especial.


Domingo: 27 de noviembre de 2011

7.00 a 7.45 am. Desayuno

9.00 a 12.00 m. Ponencias, lectura de poemas y presentaciones de libros.

12.00 a 13.00 h. Almuerzo

13.00 a 16.00 h. Turismo local.

16.00 h. Retorno de la delegaciones.


César Balcázar Labrín
Alcalde Distrital de Aucallama
Presidente de la organización

Áureo Sotelo Huerta
Organizador- Presidente de Aepa-FL

Danilo Barrón Pastor
Organizador - Comisión académica

Héctor Cuadros Aponte
Organizador - Sede Aucallama

*
Participantes

1. Américo Portella Egúzquiza. / Poeta e investigador piscobambino.

2. Ana María Intili. / Poeta.

3. Anatolia Aldave Reyes. / Poeta y declamadora nacional.

4. Armando Arteaga Núñez. / Poeta y cineasta.

5. Áureo Sotelo Huerta /Dramaturgo nacional, Universidad Ricardo Palma.

6. Bernardo Rafael Álvarez / Poeta del Grupo Hora Zero.

7. Danilo Barrón Pastor. / Poeta y promotor cultural – UNFV – UJBM – UNAC.

8. Danilo Sánchez Lihón. / Poeta y promotor cultural de Capulí, Vallejo y su tierra.

9. David Barrón Pastor. / Músico y artista.

10. Domingo de Guzmán Huamán Sánchez / Músico y poeta huaracino.

11. Elizabeth Giraldo Chávez. / Especialista en comunicación UNAC.

12. Elmer Neyra Valverde. / Poeta e investigador Piscobambino.

13. Emiliano Pastor Neyra / Narrador y poeta piscobambino.

14. Eva Velásquez Lecca / Poeta chimbotana.

15. Francisco Quijano Meléndez. /

16. Gloria Dávila Espinoza. / Narradora y declamadora huanuqueña.

17. Grimaneza Tafur Collazos. / Narradora de San Luis.

18. Javier Cotillo Caballero. (Jaco) -/ Poeta e investigador cultural.

19. Joan Viva / Poeta.

20. José Carlos López Carreño. /

21. Juan Milla Jara. /

22. Juan Rodríguez Jara. / Poeta piscobambino.

23. Lilia Margot Uzuriaga Cerna. /

24. Luis Albitres Mendo. / Artista plástico.

25. Lupe Arias Torres. / Especialista en comunicación UNAC.

26. Mavi Márquez. / Promotora cultural.

27. Miguel Arribasplata Cabanillas. / Narrador.

28. Milton Pastor Neyra. / Poeta e investigador piscobambino.

29. Norka Zulema Bríos Ramos. / Declamación poética.

30. Óskar Danilo Barrón Díaz. / Estudiante.

31. Roberto Arriola Badaracco. / Decimista UJBM.

32. Rodrigo Solórzano Espinoza. / Poeta y promotor cultural, Presidente de AEPA regional.

33. Samuel Lucio Cornelio Abad. /

34. Sara Esperanza Rivera Roque. /

35. Sofía Antonia Rivera Roque. /

36. Susana Rosas Vargas/ Capacitadora.

37. Susy Morales . / Poeta.

38. Umberto Lozano Torres. /

39. Verónica Solórzano Vidal. / Poeta huaracina.

40. Víctor José La chira Acevedo. / Decimista.

41. Wálter Terreros. /

42. Wálter Vidal Tarazona. / Poeta y docente universitario UNAC.

Delegación de Huacho

1. Augusto Escalante Apéstegui. / poeta y docente UNJFSC

2. Carlos Quispe Villar. /

3. Christian Montes Huapalla. /

4. Filomeno Zubieta Núñez. / Historiador UNJFSC

5. Luis Junniors Olórtegui Castillejo. /

6. Maricruz del Carmen Amado Castillo. /

7. Víctor Junior Claudio Ambrosio. /

Delegación de Chimbote

1. César Quispe Ramírez / Poeta - Chimbote

2. Elvia Benavente Alvarez. / Escritora.

3. Jhonny Amarildo Obeso Sánchez. / Artista Plástico.

4. Jorge Eduardo Alvarez Bocanaegra. / Actor - Declamador.

5. Vanessa Chaparro. / Crítico literaria - Lima

6. Víctor Hugo Alvitez Moncada. / Gestor Cultural.

Participación de Aucallama

1. Alberto Colán Falcón . /Escritor

2. Alejandro Melgar Vásquez. /

3. Armando Azcuña Niño De Guzmán. /

4. Belinda Olguín Cabrera. Guia De Turismo Y Promotora .

5. Cesar Emilio Balcázar Labrín. / Alcalde de Aucallama.

6. Estaban Alejandro Sulca Campos. /

7. Héctor Cuadros Ponte. / Director de turismo de la Municipalidad de Aucallama.

8. Héctor Rodrigo Cuadros Hervis. /

9. Jesús Andrés Sulca Campos. /

10. Jorge Lenci Alegre. /Escritor

11. Juan Winston Barreto Boggio. / Promotor del Turismo y la Cultura en todo el Norte Chico.

12. Juana Isabel Dávila Robles. /

13. Juana Isabel Dávila Robles. / Decimista y difusora de la música afro mestizaje de Aucallama.

14. Karla Ximena Álvarez Malafaya. /

15. Lady Laura Campos Chacón. /

16. Linda Vargas Galloso. /

17. Manuel Carrillo Moscoso. /Escritor

18. María Del Carmen Vílchez Lobatón. /

19. María Romero Flores. /

20. Marta Ramírez de Lenci . /Escritor

21. Mayorie Evelyn Loli Salcedo. /

22. Pedro Badajoz Jeri. / Gerente Municipal de Aucallama.

23. Roberto Carlos Muños Godoy. /

24. Víctor Ulises Dávila Valdiviezo. /

25. Ximena Boza Delgado. /

26. Yakira Díaz Liman. /

Grupos participantes

27. Aller Afro - Mestizaje Aucallama - Huaral.

28. Asociación Artística Afro - Mestizaje Aucallama – Huaral.

29. Nuevo Impacto de Cajamarca.

30. Taller Folklore Negro y Punto - Filial Aucallama.


Ponencias

1. Américo Portella Egúsquiza: Recorridos artísticos de Rosa Alarco en la campiña de Huacho./ Nombres de calles ancashinos en la ciudad de Huaral.

2. Ana María Intili: Conversaciones con Carlos Eduardo Zavaleta.

3. Armando Arteaga: Arguedas en la textualidad de la poesía quechua.

4. Áureo Sotelo Huerta: Arguedas y todas las sangres

5. Christian Montes Huapalla: Márquez de Villafuerte y la hacienda de Pasamayo.

6. Danilo Barrón Pastor: Trova y poesía.

7. Danilo Sánchez Lihón:

8. Domingo de Guzmán Huamán Sánchez (Huarás): Identidad, Música Y Poesía Andina.

9. Gloria Dávila Espinoza: Producción literaria Quechua.

10. Javier Cotillo Caballero (Jaco): El castechua, nueva corriente literaria.

11. Juan Winston Barreto Boggio. (Dueño del Castillo de Chancay Promotor del Turismo y La Cultura en todo El Norte Chico.)

12. Juana Isabel Dávila Robles: La música Afro mestizaje de Aucallama.

13. Luis Albitres Mendo. / Arguedas y la revalorización del mundo andino.

14. Luis Junniors Olórtegui Castillejo: Carlos Fermín Fitzcarral: Trascendencia y vigencia.

15. Mavi Márquez. / Importancia de la Ecología.

16. Max Alejandro Melgar Vásquez: Informe sobre la promoción cultural de Aucallama.

17. Max Alejandro Melgar Vásquez: Machu Picchu en las poéticas de Neruda y Melgar.

18. Miguel Arribasplata Cabanillas: Puente sobre el mundo: Los ríos profundos. El forastero Ernesto no es un aculturado. (José María Arguedas)

19. Milton Pastor Neyra: Megatendencias del siglo 21 en la poesía luzuriaguina.

20. Víctor Hugo Alvítez Moncada: Homenaje a la vida y obra del maestro carhuacino Cristóbal Bustos Chávez.

21. Víctor Hugo Alvítez Moncada: Literatura y fatalidad. Vida y Obra del escritor Julio Orbegoso Ríos.

22. Roberto Arriola: La décima en el Perú.

Presentación de libros

1. Augusto Escalante: Para mamita (poemario para niños)

2. Áureo Sotelo Huerta: La revista Rima rima

3. César Quispe: Infidelidades y demás yerbas. Cuento del escritor porteño Enrique Tamay.

4. Danilo Barrón Pastor: Gotas de experiencia.

5. Domingo de Guzmán Huamán Sánchez (Huarás)/ Identidad, Música y Poesía Andina

6. Elizabeth Giraldo Chávez: "Voces maestras".

7. Gloria Dávila Espinoza: La casa del demonio (cuentos) homenaje a José María Arguedas

8. Jorge Álvarez: Presentación del CD Rom "A Corazón Abierto".

9. Lupe Arias Torres: "Palabras maestras".

10. Norka Zulema Bríos Ramos. / El acuerdo de Aucallama de Nalo Alvarado.

11. Samuel Cornelio Abad: Personajes ilustres de Huacho.

12. Susy Morales Coz: Diarios Revelados (poemas y cuentos para toda edad)

13. Susy Morales Coz: Feeling the Sky (poemas en ingles)

14. Susy Morales Coz: La Abejita Cindy (libro para niños)

15. Vanessa Chaparro (UNFV): "Una piedra desplomada" del poeta chimbotano César Quispe./ Premio Internacional de Poesía.

16. Víctor Hugo Alvítez: El periodismo en Ancash, del maestro Cristóbal Bustos Chávez (carhuasino)

17. Wálter Vidal Tarazona: Cantos para el gorrión.

Salida de Lima

Nombre de la empresa:
Empresa de transportes turismo Huaral SA.
Dirección Principal
JR. Jirón Julián Piñeyro #440 (Loreto)
Referencia de ubicación
Cerca a la municipalidad del Rímac
Concentración:
Día: 25 de noviembre (viernes)
Hora: 13.30 pm. (una y media de la tarde)
Responsable: Áureo Sotelo Huerta
Teléfono: casa: 3481575
Cel. 968281505
*
Municipalidad Distrital de Aucallama
Provincia de Huaral - Lima

I Encuentro de integración cultural Aucallama y La Asociación de Escritores y Poetas Ancashinos - Filial Lima
Porfirio Vásquez - Carlos Eduardo Zavaleta
...
Aucallama, noviembre de 2 011.

Señor:
Armando Arteaga
De mi especial consideración:

La presente tiene por objeto invitar a Ud. al Primer Encuentro de integración cultural Aucallama y La Asociación de Escritores y Poetas Ancashinos - Filial Lima - "Porfirio Vásquez" - "Carlos Eduardo Zavaleta", que se desarrollará en la ciudad de Aucallama - Huaral, los días 25, 26 y 27 de noviembre de 2011.

Este encuentro cuenta con la organización de la Asociación de Escritores y Poetas de Ancash - Filial Lima (AEPA - FL) y los auspicios de la Universidad Nacional José Faustino Sánchez Carrión de Huacho.

Habrá exposición de ponencias, charlas, conferencias, presentación de libros, mesas redondas, recitales poéticos, obras de teatro y una feria del libro durante la realización del encuentro.

Nuestro municipio organiza y financia el alojamiento y la alimentación de los participantes a este encuentro cultural; a cambio, pedimos, la presentación de una ponencia, conforme a la Convocatoria que adjuntamos a la presente, que será sustentada durante el desarrollo del evento.

Agradeciendo desde ya su atención a la presente, reciba mis felicitaciones por el alto valor de su producción intelectual.

Atentamente,

César E. Balcázar Labrín
Alcalde

PERFORMANCE: POEMAS ENTRE PÁJAROS Y ÁRBOLES

17-18-19 DE DICIEMBRE:

PERFORMANCE: POEMAS ENTRE PÁJAROS Y ÁRBOLES


El blog Laguna Brechtiana y la Revista Trafalgar Square invitan a la:

PERFORMANCE: POEMAS ENTRE PÁJAROS Y ÁRBOLES
17-18-19 DE DICIEMBRE.

Invitación a escribir entre pájaros y árboles (Javier Heraud). Performance. Poesía en el viento. Tinta china sobre tocuyo en albayalde entre los pinos de Ranhuailla. Celebración en la mañana de los años mil. Toda la poesía del continente sur junto a los brujos de la nieve estrellada. Tres días al alba de los caminos, las lagunas, los ríos. Tres noches de constelaciones y lluvia con las naves del corazón bebido. Tres noches sobre el caballo rubio de las horas. Todo gravado y publicado. No poses. No vaguedades. No increíbles. Chuchuhuasi. Traemos el mar del Callao a las montañas del Cusco. Traemos el mar de Barcelona en las nubes de Larrea y Vallejo. Llegamos al lago primordial de Nava y Churata. Trío eléctrico y caravana con teatrín y sueños. Y recuerdo de Carlos Trías, Raúl Brózovich, Osvaldo Lamborghini y Hector Libertella.

Lista de invitados:

Carlos López Degregori / Américo Yabar / Basilio Sánchez / Miguel Ángel Coletti Coletti / Carlos Estela / Edgar Saavedra / Pablo Salazar-Calderón / Vanessa Martínez / Carlos Calderón Fajardo / Feliciano Padilla / Omar Aramayo / Mauro Mamani / José Luis Velásquez Garambell / José Córdova / Kreit Vargas / Filonilo Catalina / Juan Carlos Lázaro / Armando Arteaga / Carmela Gutiérrez / Marina Schreiber / Alfredo Portal / Robert Baca / Bernardo Rafael Álvarez / Carlos Carnero Figuerola / Rosina Valcárcel / Carlos Alberto Ostolaza / Carlos Quenaya / Pedro Granados / Fredy Roncalla / E. Verástegui / Frido Martin / Jorge Flores Aibar / Juan Yufra / E. Vila-Matas / Cristina Fernández Cubas / Rodolfo Ibarra / Gloria Mendoza / Fernando Ampuero / Rafael Sender / Antonio Cisneros / Rodolfo Hinostroza / Carlos Velásquez Iwaki / Leo Tarifeño / Lolo Palza / Oscar Málaga / Elqui Burgos / José Carlos Cataño / Carlos Meneses / Santiago Lopez Maguiña / Rodrigo Quijano / Teresa Ruiz Rosas / Diana de Hollanda / Mauricio Electorat / Martín Horta / Miguel Paz / Álvaro Fischer Heredia / Luis Carlos Musso / Ángeles Martínez / Roger Rumrril / Luis Fernando Chueca / Magdalena Chocano / William Rowe / Willi Niño de Guzmán / Yoyo Manrique / Raul Tola (padre) / Rubén Quiróz / Mirko Lauer / Oscar Collazos / Harold Alvarado Tenorio / Alfredo Herrera / Toni Marí / Nicole D’Amonville / Rodolfo Hässler / Isabel Sabogal / Willi Hurtado de Mendoza / Maru Delgado / Raúl Gallegos / Nené / Gabriela Cuba / Camilo Torres / Leonardo Tarifeño / Juan Mezco / Carlos Hénderson / Abelardo Oquendo / Leonidas Zeballos / Mario Montalbetti / Domingo de Ramos / Juan Cristóbal / Vladimir Herrera / Helena Usandizaga / Jorge Kishimoto.

Recomendaciones: Traer ropa de lluvia. Los organizadores esperan en la escalerilla del avión o autobús. Se cuenta con alojamiento y comida. Vía e-mail: confirmar asistencia para viaje y entradas a Macchu Picchu. Confirmar asistencia para excursión a Puerto Maldonado. Confirmar asistencia para excursión al Lago Titicaca. (Las reconfirmaciones se hacen llegando a Cusco). Los poetas jóvenes traerán su bolsa de dormir. Las poetas tendrán habitación con baño. Los poetas mayores tendrán chimenea y pantuflas etc.

El e-mail es: aucells2009@gmail.com
Teléfono 084-226330. Celular 984986279. RPM # 0040013
Cusco - Perú.

noviembre 19, 2011

"POEMAS" de Czeslaw Milosz.


Czeslaw Milosz

"POEMAS" de Czeslaw Milosz.


Ars poética

Siempre he aspirado a una forma mucho más amplia
Que, libre de las aspiraciones de la poesía y la prosa,
Nos dejase entendernos sin exponer
A lector y autor a sublimes agonías.
En la esencia misma de la poesía hay algo indecente:
Expresamos cosas que ignorábamos tener en nosotros.
De modo que parpadeamos como si hubiera
saltado un tigre
Y estuviese en la luz moviendo la cola.
Por eso dicen justamente que un demonio dicta la poesía,
Aunque es exagerado sostener que se trata de un ángel.
Es arduo adivinar de dónde viene el orgullo de los
poetas
Cuando tan a menudo quedan avergonzados
por la revelación de su fragilidad.
¿Qué persona razonable sería una ciudad de demonios
Que se portan a sus anchas, hablan en muchas lenguas
Y, no satisfechos con robarle sus labios y sus manos,
Trabajan en cambiarle el destino para su convivencia
infernal?
Es cierto que hoy se aprecia mucho lo mórbido;
Por tanto acaso pienses que sólo estoy bromeando
O simplemente has encontrado otros medios
De alabar el arte sin ayuda de la ironía.
Hubo un tiempo en que sólo los libros sabios eran leídos
Y nos ayudaban a soportar nuestro dolor y sufrimiento.
Esto, después de todo, no es lo mismo
Que hojear cientos de obras recién salidas de clínicas
psiquiátricas.
Y sin embargo es diferente de lo que parece
Y nosotros somos distintos de cómo nos vemos
en nuestros delirios.
Por tanto las personas preservan su identidad silenciosa
Y ganan el respeto de sus parientes y vecinos.
El propósito de la poesía es recordarnos
Qué difícil es seguir siendo una sola persona,
Ya que está abierta nuestra casa, no tiene llaves
Y huéspedes invisibles entran y salen a su antojo.
De acuerdo, no es poesía lo que ahora digo:
Los poemas deben escribirse rara vez y de mala gana,
Bajo penas intolerables y sólo con la esperanza
De que los buenos espíritus, no los malos, nos elijan
como instrumento.

Traducción de José Emilio Pacheco


EL PAISAJE

El paisaje no necesitaba nada excepto glorificación.
Excepto mensajeros reales que trajeran sus dones:
Un nombre con un atributo y un verbo inflexivo.
Si solamente preciosos robles copiosamente brillaran
Cuando nuestros bravos estudiantes, en un camino sobre el valle,
Pasean y cantan "La Oda a la Alegría ".
Si al menos un solitario pastor grabara cartas en una corteza.

El paisaje no necesitaba nada excepto glorificación.
Pero no existían mensajeros. Matorrales, oscuras gargantas,
Bosque colgando del bosque, pájaro de largo gemido.
Y quién aquí podría iniciar una frase?
El paisaje era, quien conoce, probablemente hermoso.
Allá abajo, todo estaba derrumbándose: las salas del castillo,
Las callejuelas detrás de la catedral, los bordellos, las tiendas.
Y ni un alma. Por tanto, de dónde podrían venir mensajeros?
Después de olvidados desastres, yo estaba heredado a la tierra,
Abajo, a la playa del mar y, arriba, a la tierra, al sol.

Versión de Rafael Díaz Borbón


ELEGÍA PARA N. N.

Si es demasiado lejos para tí, dilo.
Habrías podido correr sobre las pequeñas olas del Báltico,
atravesar el campo de Dinamarca, la floresta de hayas,
virar hacia el océano, y ya está, cerca,
el Labrador, blanco en esta estación del año.
Tú, que soñabas una isla solitaria,
si temes las ciudades, el parpadeo de los fuegos sobre las autorrutas,
habrías podido tomar el camino de los bosques sordos,
sobre torrentes revueltos y azules, y rastros del ciervo y del reno,
hasta las Sierras, hasta las minas de oro abandonadas.
El Río Sacramento te habría llevado entonces,
por entre las colinas recubiertas de encinas espinosas.
Todavía un bosque de eucaliptos, y estarás en mi casa.
Es cierto, cuando la manzanita florece,
y la bahía es azul en las mañanas de primavera,
yo pienso a mi pesar en la casa entre lagos
y en las redes recogidas bajo el cielo Lituano.
La cabaña donde te despojabas de tu traje antes del baño
se cambió para siempre en un cristal abstracto.
Y en él está la oscura miel de la tarde, junto al balcón,
y las pequeñas lechuzas, graciosas, y el olor de los arneses.
Cómo podíamos vivir entonces, yo no puedo decirlo.
Las costumbres, los trajes, vibran imprecisos,
inconsistentes, tensos hacia el final.
Es tal vez que pensábamos en las cosas tal como son?
El saber de los años fogosos ha enrojecido los caballos ante la forja,
y las pequeñas columnas en el mercado de la aldea,
y los peldaños de madera y la peluca de Mamá Fliegeltaub.
Mucho hemos aprendido, tú bien lo sabes:
cómo nos es quitado, cosa por cosa, todo aquello que no podía ser,
la gente, las comarcas.
Y el corazón no muere cuando uno creyó que debería,
pero sonreímos, el té y el pan sobre la mesa.
Sólo el remordimiento de no haber amado como se debe
esa pálida ceniza de Sachsenhausen
con un amor absoluto, que no está a la medida del hombre.
Tú te has acostumbrado a nuevos inviernos, húmedos,
a la ciudad donde la sangre del propietario alemán
fue raspada de los muros, y a donde él jamás regresó.
Tampoco yo he llevado más de lo que podía, ciudades y país.
No se puede entrar dos veces en el mismo lago,
sobre hojas descompuestas de abedul,
y quebrando una estrecha estría de sol.
Tus faltas y las mías, no fueron grandes faltas,
tus secretos y los míos, no eran grandes secretos.
Cuando te anudan la mandíbula con un pañuelo,
cuando te ponen una cruz entre los dedos,
y a lo lejos un perro ladra, brilla una estrella.

No, no es porque estés tan lejos
que no has venido el otro día, la otra noche.
De año en año madura en nosotros y nos invadirá,
yo, como tú, lo he comprendido: la indiferencia.

Berkeley, 1963

Versión de William Ospina



ESO

Ojalá por fin pudiera decir qué está en mí.
Gritar: gente, les mentí
diciendo que eso no estaba en mí,
cuando eso está ahí siempre, días y noches.
Aunque gracias a eso supe describir sus ciudades inflamables,
sus cortos amores y juegos desmembrándose en humus,
aretes, espejos, el deslizar de un tirante,
escenas de alcoba y de campos de batalla.
Escribir fue para mí estrategia de protección,
de borrar las huellas. Porque a la gente no puede gustarle
aquél que alcanza lo prohibido.

Llamo en mi ayuda a los ríos en los que nadé, lagos
con puentecillos entre cedazos, valle
en cuyo eco la canción duplica la luz del anochecer,
y confieso que mis extáticos halagos a la existencia
sólo pudieron ser entrenamientos de alto estilo,
Pero abajo estaba eso, que no me atrevo nombrar.

Eso se parece al pensamiento de alguien sin hogar, cuando
atraviesa la ciudad ajena, congelada.

Se asemeja al momento cuando un judío cercado ve aproximarse
los pesados cascos de los gendarmes alemanes.

Eso es cuando el hijo del rey se dirige a la ciudad y ve el mundo
real: pobreza, enfermedad, vejez y muerte.

Eso puede ser comparado con el inmóvil rostro de alguien
que entendió que fue abandonado para siempre.

O con las palabras del médico sobre la sentencia inevitable.

Porque eso significa enfrentar un muro de piedra
y entender que ese muro no cederá ante ninguna de nuestras súplicas.

Versión de Agnieszka Kawecka


ESTUDIO DE LA SOLEDAD

Un guardián de conductos de larga-distancia en el desierto?
Un equipo de un solo hombre para una fortaleza en la arena?
Quienquiera que él fuera. Al alba vio las surcadas montañas
El color de las cenizas, encima la fundida oscuridad,
Saturada de violeta, irrumpiendo en un fluido carmín,
Aún permanecerían, inmensos, en la luz naranja.
Día tras día. Y, antes que lo notara, año tras año.
Para quién, pensó, ese esplendor? Para mí, solitari0?
Aún permanecerá aquí por mucho tiempo después que yo perezca.
Qué es eso en el ojo de una lagartija? O cuándo fue visto
por un pájaro migratorio?
Y si yo soy toda la humanidad, existe ella a si misma sin mí?
Y sabía que no se acostumbraba pregonarlo, por ninguno de ellos
se salvaría.

Versión de Rafael Díaz Borbón


HONESTA DESCRIPCIÓN DE MÍ MISMO

Tomándome un whisky en un aeropuerto,
digamos que en Minneapolis

Mis oídos captan cada vez menos las conversaciones,
mis ojos se debilitan, pero siguen siendo insaciables.

Veo sus piernas en minifalda, en pantalones o envueltas
en telas ligeras.

A cada una la observo por separado, sus traseros y
sus muslos, pensativo, arrullado por sueños porno.

Viejo verde, ya sería tiempo de que te fueras a la tumba
en lugar de entretenerte con juegos y diversiones de jóvenes.

No es verdad, hago solamente lo que siempre he hecho,
ordenando las escenas de esta tierra bajo el dictado
de la imaginación erótica.

No deseo a esas criaturas en particular, lo deseo todo,
y ellas son como el signo de una relación extática.

No es mi culpa que así estemos constituidos: la mitad
de contemplación desinteresada y la mitad de apetito.

Si después de morir me voy al cielo, tendrá que ser
como aquí, sólo que liberado de estos torpes sentidos,
de estos pesados huesos.

Transformado en mirar puro, seguiré devorando las
proporciones del cuerpo humano, el color de los lirios,
esa calle parisina en un amanecer de junio, y toda la
extraordinaria, inconcebible multiplicidad de las cosas visibles.

Versión de Gerardo Beltrán

Czeslaw Milosz es uno de los más grandes poetas del siglo XX. Aunque nació en Lituania en 1911, Milosz es un autor polaco que vivió en Varsovia durante la ocupación nazi. En 1951 se separó del partido comunista y se exilió a París. En 1960 se trasladó definitivamente a los Estados Unidos para asumir un cargo como profesor en la Universidad de California en Berkeley. Ganó el Premio Nobel de Literatura en 1980. Pertenece a una extraordinaria generación de poetas polacos que incluyen a otra ganadora del Premio Nobel, Wislawa Szymborska (1923), aunque también destacan Zbigniew Herbert (1924) y Anna Swir (Swirszczynska, 1909-1984).