LA POESÍA PIURANA CONTEMPORÁNEA
Por Armando Arteaga
La Caja Piura y la Municipalidad
de Piura, acaban de auspiciar la
publicación de una decena de libros sobre temas de literatura piurana. La
colección “Biblioteca Piura” ha publicado a los escritores piuranos: Marco
Martos, Cronwell Jara Jiménez, Alberto
Alarcón, Libertad Orozco, Víctor López García,
Miguel Ángel Zapata, Roger Santaváñez, Luis Eduardo García, Dimas
Arrieta y Harold Alva. No están todos los que son, ni son todos los que están,
pero es un gesto que hay que aplaudir. Siempre es bueno que gane la cultura
piurana.
El propósito, al realizar la antología poética de una región
de cualquier parte del mundo es mostrar y sustentar con estudios, en
breve, lo que corresponde de una
literatura institucionalizada, su
equivalente producido -más o menos- exacto con la territorialidad comprometida:
en obras, autores, movimientos, escuelas, tendencias, y por momentos empoderar la creatividad de
cada uno de esos poetas, con una crítica sustentada, para entender y valorar
una época, un acontecimiento, y por último,
una retórica literaria.
La dispersión bibliográfica es el
primer escollo, en una región como es Piura. ¿Dónde encontrar los libros raros
de tan corto tiraje de estos seres extraños, raros, bohemios, difíciles,
viajeros inhallables, locos extraños, hombres cultos de magisterios
inconfesables, extremistas políticos, suicidas, o seres famosos?. No es
sencillo “armar” antologías de poesía que reúnan las ideas y las
manifestaciones estéticas de un tiempo pasado.
Perseguir en décadas sus publicaciones no es nada fácil. Es papel
de la crítica literaria ante tanta diversificación cultural, acumular
información, mostrar pruebas inconfesables, rebuscar archivos
periodísticos, entrevistar familiares,
recoger anécdotas, guardar papeles con poemas rotos, para construir el
imaginario literario, para valorar y entender la poesía de un determinado
contexto social de una región y un país.
En Piura, Carlos Robles Razuri, fue
el primer escritor que trazó en los años cincuenta del siglo pasado un
“Panorama de la literatura piurana”, lo mismo que, realizó una “Breve Antología
de Poetas Piuranos”, tal vez por haber sido profesor de Castellano y Literatura
en el “San Miguel”, y también en “Salesiano”, “San Ignacio”, “Lourdes”, y “Fátima”:
formó varias generaciones de estudiantes piuranos y piuranas. Recordado por su
alumno Mario Vargas Llosa en “El pez en el agua”: “El ciego Robles, cuando descubrió mi vocación, me tomó mucho aprecio y
solía prestarme libros -los tenia todos forrados con un papel color rosa y un
sellito con su nombre- , entre los que recuerdo los dos primeros que leí de
Azorín: Al margen de los clásicos y La ruta de Don Quijote”.
La “Breve Antología de Poetas
Piuranos” de Robles Razuri delimitó el espacio literaria poético desde
Salaverry hasta los jóvenes de entonces Federico E. Varillas Castro y Luis
Vilela. Años después, Federico E. Varrillas va a publicar “Poetas Piuranos Contemporáneos” (1958)
en el Primer Festival del Libro
Piurano. Se han publicado otras
antologías como “Panorama de la Poesía Piurana” de Juan Antón y Galán; “Los
otros. Panorama de los poetas piuranos desde 1960” (1986), y “Poetas y narradores
contemporáneos de la región Grau” de Alberto Alarcón; “Antología comentada de
la expresión literaria contemporánea de la Región Grau” (1992) de Sigifredo Burneo; “Karminka,
antología de poesía piurana” (2000) de Julio Aponte; “Poetas mayores vivos
actuales” (2012) de Miguel Antonio Varillas Velásquez; “Ausente ardor de arena
& algarrobos. Antología de la poesía
piurana contemporánea” (2017) de Miguel Ángel Hernández Sandoval. Otras, brevísimas y de épocas diversas, de
Lelis Rebolledo (en la revista “Agua”), Jorge Ita Gómez, Harold Alva, Ricardo
Musse y Fabián Bruno.
Llegando a este punto final, se
suma ahora, “Poetas del algarrobo. Antología Poética” de Víctor López García
(Diciembre 2019) de la Biblioteca Piura de Literatura, espacio poético
delimitado desde el maestro Manuel Velásquez Rojas hasta el joven Gian Pierre Codarlupo. Han surgido
nuevas generaciones de poetas, con diversas manifestaciones de conciencia
estética que se abren a las múltiples influencias de la poesía moderna.
Piura tradicional va cambiando, y
sus poetas también. Víctor López García ha situado el referente simbólico del
algarrobo: árbol legendario, fatigado y en peligro de aniquilamiento por la
avalancha consumista de demanda para hacer carbón. Como vemos la poesía piurana contemporánea es
diversa, asume la postura del cambio, tiene poetas con un excelente manejo del
lenguaje, adopta influencias de afuera que vienen de otras culturas, y conserva
la tradición poética heredada: milenaria autóctona, y ya por varios siglos: el discernimiento de lo occidental actual.